Los juzgados de Benalúa de Alicante amanecieron ayer fuertemente custodiados por efectivos antidisturbios de la Guardia Civil para intentar prevenir incidentes en un juicio por una reyerta por una relación sentimental entre los miembros de dos clanes familiares ocurrida en Elda en septiembre de 2018. El despliegue de agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana armados con metralletas por los pasillos de la sede judicial contrastaban con el aspecto casi desierto del edificio ante la falta de señalamientos por las fiestas de Hogueras.
Una vista que pudo desarrollarse sin percance alguno tras alcanzarse un acuerdo entre las partes y declararse culpables los tres acusados de un delito de lesiones. La labor de los agentes consistió en mantener separadas a las dos familias, que estaban en extremos distintos del pasillo.
Dos personas de la otra familia resultaron heridos durante la pelea, desencadenada por la negativa del padre de una menor de 14 años a la relación sentimental que ésta tenía con otro joven de 17 años de la misma familia. El novio de la joven, que apuñaló a miembros de la familia de ésta durante la pelea, fue condenado en su día por intento de homicidio en un juzgado de Menores de Alicante, ya que cuando ocurrieron los hechos era menor de edad. Ayer se sentaban en el banquillo, un hermano de éste, la madre y su tío, acusados de las lesiones sufridas por la familia agredida durante la pelea. El juicio por conformidad se cerró en el juzgado de lo Penal ocho de Alicante en el que los acusados estaban defendidos por el abogado Joaquín de Lacy, mientras que el letrado Moisés Candela ejercía la acusación particular para la familia de los heridos.
El hermano aceptó una condena de tres años de cárcel por dos delitos de lesiones, uno de ellos con alevosía. Por su parte, la madre aceptó seis meses por lesiones, mientras que al tío se le condena como cooperador necesario de la agresión cometida por su hermana. La sentencia les impone también una orden de alejamiento que les impide acercarse a los agredidos en año y medio.
Los hechos ocurrieron en la plaza Simón Bolívar de Elda el 3 de septiembre de 2018 después de un altercado en casa de la menor con su familia. Los familiares de ésta se oponían a la relación que mantenía con el joven de 17 años del otro clan. Aquella mañana, la chica de 14 años estaba hablando por teléfono con su novio en casa cuando la madre la mandó a hacer un recado, algo a lo que la chica se negó. El hermano le reprochó el comportamiento que estaba teniendo en los últimos tiempos, una discusión que el joven novio escuchó por el teléfono. La menor salió corriendo de la casa en dirección a la plaza, mientras que el novio acompañado por otros familiares también salieron corriendo hacia el mismo lugar.
Allí el airado novio empezó a insultar al hermano de su pareja y acabó enfrentándose a navajazos con él, respaldado por sus familiares. Dos personas resultaron heridas durante la reyerta, el hermano y el padre de la novia. Los autores de la agresión al ver que la plaza se llenaba de familiares del otro clan huyó del lugar. Pasaron varios meses escondidos en Murcia hasta que se entregaron en la Comisaría de Elda.
