Agentes de la Policía Nacional han detenido en Alicante a un ingeniero informático por haber grabado con dispositivos de cámara oculta a sus familiares en el cuarto de baño. En el domicilio, el ahora arrestado convivía con su pareja sentimental y las dos hijas de ésta, que eran fruto de una relación anterior. Con estas microcámaras habría obtenido imágenes íntimas de todas las personas que utilizaban el cuarto de baño, material que se quedaba almacenado en discos duros y tarjetas de memoria. La detención se produjo a raíz de que una de las hijastras denunciara en la Comisaría de Alicante que había encontrado una tarjeta de memoria USB con imágenes íntimas suyas y de otros miembros de la familia. Ante la gravedad de los hechos, el juzgado de guardia de Alicante acordó ayer prisión provisional para el detenido.

El hombre fue detenido y la Policía requisó abundante material informático en la vivienda, entre ellos discos duros y otros dispositivos de memoria en los que se encontrarían las imágenes. Se le imputa un delito contra la intimidad. Las pesquisas apuntan a que el hombre podría haber estado almacenando esas imágenes durante los últimos cuatro años. Las cámaras estarían camufladas en bolígrafos espía.

La investigación realizada por la Policía apunta a que el hombre pudo haber estado almacenando imágenes durante al menos cuatro años de todas las personas que usaban el cuarto de baño. Incluso de las hijas de su pareja sentimental cuando éstas eran menores de edad, según apuntaron las fuentes policiales consultadas por este diario. Al parecer había al menos otra cámara en la vivienda, pero las pesquisas se están centrando en la del cuarto de baño, ya que también se habrían grabado a otras personas que fueron al servicio mientras estaban en dicho domicilio.

La Brigada de Delitos Tecnológicos de la Policía Judicial se está centrando en identificar a las personas que grabadas. Se estima que una veintena de personas podrían haber sido captadas por los dispositivos. Por el momento, la investigación ha descartado que esas imágenes se hayan compartido con terceras personas y todo apunta a que el ahora detenido las tendría guardadas para su propio consumo.

El detenido se acogió a su derecho a no declarar cuando fue trasladado a Comisaría y ayer pasó a disposición del juzgado de guardia de Alicante, asistido por la letrada Pilar Beneyto. Las fuentes consultadas por este diario señalaron que el hombre justificó la presencia de las cámaras en el hecho de que quería controlar que las hijas de su pareja no tomaban drogas, mientras que para otra de las cámaras habría manifestado que sí tendría consentimiento para su instalación.

La Fiscalía reclamó ayer la prisión provisional al acusado, al considerar graves los hechos y valorando que éste era consciente de que tenía imágenes íntimas de las hijas de su pareja. Por su parte, la defensa planteó otras medidas cautelares menos gravosas que la prisión, como una orden de alejamiento que le impidiera acercarse a sus familiares mientras se tramitaba la causa. Finalmente, el juzgado acordó el encarcelamiento provisional del detenido, una medida que la defensa iba a recurrir por considerarla excesiva.