Dos bebés prematuros han fallecido en los últimos diez días en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona a causa de una inflamación intestinal complicada por la presencia de una bacteria, lo que ha obligado a aislar, al menos, a otros ocho prematuros.

Fuentes del centro hospitalario han informado este lunes a EFE de que la situación de los dos bebés fallecidos, uno de menos de 500 gramos de peso y el otro que no llegaba a los 700 gramos, era frágil, y que la causa de la muerte es una enterocolitis (inflamación intestinal) que se agravó por la presencia de la bacteria Klebsiella, que causó una sepsis a los bebés.

Uno de los bebés fallecidos había nacido a las 25 semanas de gestación y, el otro, a las 24 semanas. La subdirectora asistencial del Hospital Vall d'Hebron, Rocío Cebrián, y la jefa del Servicio de Medicina Preventiva y Epistemología del centro sanitario, Magda Campis, han explicado esta tarde en una comparecencia ante la prensa que la muerte de los dos bebés prematuros se ha originado por su fragilidad, ya que eran "prematuros extremos", es decir, pesaban de menos de 700 gramos.

También han asegurado que ya han tomado todas las medidas, como cerrar el "box" donde estaban los dos fallecidos para investigar cómo se ha transmitido la bacteria, aunque consideran poco probable que el contagio haya sido ambiental.

Las doctoras han informado de que están haciendo cultivos a todos los bebés prematuros para comprobar si tienen la bacteria, que han insistido en que no afecta al normal funcionamiento del Hospital materno-infantil de Vall d'Hebron

Vall d'Hebron ha abierto una investigación ante el fallecimiento de los bebés y el contagio de los otros prematuros, que también estarían afectados por la citada bacteria aunque no presentan síntomas, han asegurado las mismas fuentes.

El hospital ha descartado que se trate de un brote y ha asegurado que es una bacteria "relativamente frecuente" en los servicios sanitarios.

Este centro suele hacer cada tres semanas un análisis a los bebés ingresados para detectar rápidamente posibles bacterias, han indicado, pero en esta ocasión la bacteria Klebsiella no se localizó hasta que ya había afectado a los pequeños.

La muerte de estos dos bebés ha sido denunciada por la asociación El Defensor del Paciente ante el Fiscal Superior de Cataluña, Francisco Bañeres.

Los padres de uno de los bebés fallecidos han denunciado ante El Defensor del Paciente que su hija murió debido a un brote de Klebsiella y que esta bacteria habría afectado a cuatro de los seis bebés que a mediados de este mes de abril estaban ingresados en la sala de incubadoras.

Este padre ha descrito que las enfermeras atendían a los bebés de incubadoras situados a la derecha y a la izquierda de la sala, de forma indistinta, y que el primer bebé falleció el fin de semana del 19 al 21 de este mes y su hija, el día 24 de abril.

También ha expresado sus dudas por la limpieza, ya que "no es muy normal que al andar por la sala las suelas de los zapatos se quedaran pegadas" al suelo.

Delito contra la salud

El Defensor del Paciente ha vinculado, en la misiva dirigida al Fiscal, la expansión de la bacteria a la suciedad que detectó esta entidad recientemente, y que también denunció en un comunicado a finales de marzo.

"Nos llena de dolor que esto se haya cumplido ya que, al menos cuatro bebés -según esta asociación-, han sido objeto de este peligro por falta de asepsia".

También ha denunciado que, en este caso, no se tuvo la precaución de trasladar de inmediato a los bebés cuando se tuvo conocimiento del primer afectado.

"Entendemos esto como un delito contra la salud de los ciudadanos, máxime cuando se trata de bebés o de personas con las defensas bajas en un centro sanitario, que debe estar totalmente aséptico, porque en ello va la vida de las personas", ha argumentado la asociación.

La Klebsiella es una bacteria que suele producir infecciones de pulmón, de las vías urinarias, del tracto intestinal e infección en las heridas, y en los últimos meses ha centrado la atención y el debate en la comunidad científica mundial, ya que es muy resistente a los antibióticos más conocidos.