La Guardia Civil detuvo en Calp a un hombre de 27 años como presunto autor de un delito de agresión sexual y otro de robo con violencia de un teléfono móvil a una joven de esa misma localidad.

Los hechos se produjeron el pasado día 22 de abril, cuando una chica que caminaba por una avenida notó como un varón la seguía. De repente, el individuo se abalanzó sobre ella, la cogió con fuerza por el cuello y la lanzó contra la pared mientras la manoseaba. La joven, de 19 años, comenzó a gritar para pedir ayuda, al tiempo que intentaba llamar a emergencias con su teléfono, momento en que el agresor aprovechó para arrebatarle el móvil y salir huyendo, evitando así que la chica pudiera alertar a alguien de lo ocurrido. Fue otra mujer que pasaba por la zona en ese momento la que auxilió a la chica agredida, ya que fue testigo de cómo el autor de los hechos corría y se marchaba en un vehículo.

Cuando la Guardia Civil y la Policía Local de Calp llegaron al lugar en el que se produjo el ataque violento atendieron a la víctima, que se encontraba bajo una crisis de pánico, e interrogaron a la testigo. A pesar de la inmediatez con la que ocurrió todo, la mujer que presenció la escena pudo aportar parte de la matrícula del coche, la descripción física y la vestimenta del hombre. Con estos datos los agentes pusieron en marcha un dispositivo de búsqueda y pudieron localizar ese mismo día un vehículo cuyas placas de matrícula coincidían con los datos facilitados por la testigo, estacionado en un parking de tierra.

Finalmente se pudo detener al agresor, que pasó a disposición judicial el viernes y quedó en libertad con cargos.