La familia de Nuria Escalante, desparecida en Ibiza en octubre, recurrirá la decisión judicial de dejar en libertad al principal sospechoso del caso, según ha confirmado a Europa Press el letrado de la familia José Marí­a Costa.

El recurso se está preparando y será presentado en breve. Costa ha recordado que, entre los motivos del recurso, hace unos 20 días la Audiencia Provincial destacó las "incoherencias" del principal investigado, "sin explicaciones lógicas" en sus declaraciones, además de la "gravedad del delito" y la posibilidad de destrucción de pruebas si quedaba en libertad.

Según el letrado, en estos momentos no están analizando si existen pruebas condenatorias contra el principal sospechoso, sino si sus explicaciones "tienen o no coherencia". Costa ha recordado que horas después de la desaparición, este hombre borró sus conversaciones y otros elementos de su teléfono.

El principal sospechoso quedó este miércoles en libertad y deberá comparecer ante el juez todos los lunes, misma medida cautelar que la impuesta al resto de acusados. De los cinco detenidos por este caso, sólo este hombre, un polaco de 37 años, permanecía en prisión por la desaparición de Escalante en octubre de 2018.

La letrada, encargada de la defensa del resto de detenidos en el caso, ha recordado que no se hallaron restos de ADN de Escalante en la casa del polaco, ni en la de sus defendidos.

Tampoco las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de Sant Antoni han podido demostrar si el hasta ahora detenido trasladó en un carrito de supermercado el cuerpo de Escalante en la noche de los hechos.

Derriban la casa okupa donde apareció el equipaje de Escalante

Una máquina excavadora derribó ayer por la mañana la casa okupa donde la Guardia Civil encontró el equipaje de Nuria Ester Escalante. Se trata de un viejo edificio de una sola planta situado en la rotonda de entrada a Sant Antoni, frente al supermercado Lidl.

También fue en este mismo lugar donde se encontraron restos de sangre que, una vez analizados, se comprobó que no pertenecían a la mujer desaparecida.

Desde el Ayuntamiento de Sant Antoni explicaron ayer que este derribo no tiene ninguna relación con la investigación de la desaparición de la mujer, sino que estaba previsto desde hace tiempo. Los propietarios del inmueble ya habían solicitado el derribo del inmueble el pasado mes de marzo.