La Audiencia de Alicante sentó en el banquillo ayer a una mujer acusada de haber atropellado a su expareja en Benidorm de manera intencionada tras una discusión. La mujer adujo que fue algo totalmente accidental y que perdió el control del coche. La Fiscalía reclama una pena de cinco años y medio de cárcel para ella por un delito de lesiones, pero la acusación particular que ejerce la víctima considera que los hechos constituyen una imprudencia, descartando la intención de atropellar deliberadamente.

Los hechos ocurrieron la madrugada del 16 de abril de 2016 en la calle Ibiza de Benidorm. La acusada admitió que había tenido una discusión con su expareja y que se marchó del lugar en el coche. Según su versión, mientras iba conduciendo se dio cuenta de que se había llevado las llaves de éste y que regresó para devolvérselas. Sin embargo, al acelerar perdió el control del vehículo y acabó atropellándole.

Secuelas

La víctima acabó atrapado entre el coche y un muro perteneciente a un hotel de la zona. El hombre sufrió numerosas secuelas como consecuencia del atropello, ya que le rompió ambas piernas y, en el caso de la derecha, había una factura abierta. Para recuperarse de estas lesiones, estuvo cerca de un año recibiendo tratamiento. El hombre tiene diagnosticado una limitación parcial de su movilidad de más de un 33% para su rendimiento profesional, requiriendo el uso de plantillas y de muletas para grandes desplazamientos y tiene dificultades para correr o saltar.

Durante su declaración, la víctima trató de exculpar a su expareja y aseguró que no concebía que ella hubiera tratado de atropellarlo de manera deliberada. El hombre aseguró que pensaba que ella quería darle un susto pero que aceleró tanto que acabó perdiendo el control del coche. Los dos llegaron a retomar la relación tras el accidente, pero la acabaron dejando definitivamente unos meses después, según explicaron fuentes cercanas al caso.

Durante el juicio también declararon los agentes de atestados de la Policía Local de Benidorm que investigaron el siniestro y que concluyeron que el coche aceleró la marcha y en dirección hacia el lugar en el que se encontraba el hombre.

La intencionalidad o no del accidente va a ser una de las claves de la sentencia, ya que se pide la responsabilidad civil de la compañía de seguros del vehículo para que indemnice tanto al lesionado, como por los daños causados en el hotel como consecuencia de la colisión. Un muro de piedra, el luminoso y la instalación eléctrico resultaron dañados. En el caso de ser un siniestro deliberado, la compañía reclamaría a la acusada el dinero de las indemnizaciones.

El juicio quedó ayer visto para sentencia en la Sección Décima de la Audiencia Provincial.