La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y la Agencia Tributaria han detenido en Alicante y otras cinco provincias a 21 miembros de dos grupos criminales en el mayor golpe al fraude del IVA en el sector de los hidrocarburos, en una operación en la que se ha detectado un desfalco para las arcas públicas de 150 millones de euros.

Se trata de la operación «Drake», de la que informaron ayer en rueda de prensa el teniente coronel Antonio Balas, jefe del Grupo de Delincuencia Económica de la UCO; y José Manuel Alarcón, responsable de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) de la Agencia Tributaria.

La operación se ha desarrollado en Alicante, Castellón, Valencia, Lleida, Girona y Madrid y se han incautado de dos barcos, 61 vehículos de alta gama, 2 millones de litros de combustible, además de haberse bloqueado 347 cuentas bancarias de las más de 1.000 analizadas por los investigadores y 155 inmuebles.

En esta operación, que en palabras de Balas «ha dejado prácticamente a cero» la actividad delictiva de este tipo, se han investigado a más de 100 personas, aunque finalmente se ha detenido a 21 -en libertad con medidas cautelares-, y se ha descubierto un entramado de 300 empresas.

Aún no se ha cuantificado el valor de todo lo incautado, pero una primera estimación lo cifra en 4 millones el combustible, en 150 millones los inmuebles, en 4 ó 5 millones los vehículos y en una cantidad también muy considerable las cuentas corrientes. Además, se ha intervenido cerca de un millón de euros en metálico.

Según el resultado de las pesquisas, las dos organizaciones desarticuladas centraban su actividad delictiva en el impago de IVA en la venta al por mayor del producto mediante empresas instrumentales y testaferros. Es decir, repercutían el IVA a sus clientes pero no lo declaraban a Hacienda, con lo que obtenían importantes beneficios. Además, podían venderlo a gasolineras de todo el territorio nacional, a un precio más bajo en una competencia desleal con los distribuidores legales.