La Fiscalía mantuvo ayer su petición de absolución para la exconcejal de Fiestas de Castalla, Magdalena Durá, juzgada por un jurado popular por la adjudicación supuestamente irregular de una feria agrícola en 2012, por la festividad de San Isidro.

La acusación particular, ejercida por el PP, considera que la exedil del PSPV, ahora desvinculada del ayuntamiento, pudo conceder la organización a su propia empresa (Corda i Nuc) a través de una sociedad cooperativa interpuesta (Yabaltariq), a la que se contrató de manera directa (sin concurso) al no superar el límite legal exigido.

En su alegato final, el fiscal insistió en que no ha quedado acreditado que Durá cometiese el delito de negociaciones prohibidas a funcionarios que le ha llevado a juicio ya que fue un acuerdo aprobado por la Junta de Gobierno y la exedil no tomó ninguna decisión. También considera que no se han demostrado vínculos entre ambas empresas. La defensa de Durá se adhirió y niega irregularidades.

La acusación particular, por su parte, sí considera que existen indicios para condenar porque existían correos electrónicos remitidos desde la cuenta de su empresa a artesanos que evidenciarían que Durá sí tuvo participación en la organización de la feria.