La Guardia Civil desmanteló ayer en València, Alicante y Elda una organización que se dedicaba a concertar matrimonios de conveniencia previo pago de importantes cantidades de dinero. De momento, ya hay 28 detenidos, todos ellos de nacionalidad india y rumana. Varias de las arrestadas son mujeres comunitarias en situación precaria que se prestaron a figurar como esposas a cambio de dinero para que los falsos contrayentes, llegados de manera irregular desde India, pudiesen disponer de documentación como ciudadanos de la Unión Europea.

La investigación, que comenzó hace varios meses tras detectar irregularidades en los certificados de matrimonio exhibidos durante la tramitación de los NIE (números de identificación de extranjeros) de personas de nacionalidad india y pakistaní, ha sido llevada a cabo por el grupo de Homicidios y el servicio de Información de la Comandancia de València, bajo la supervisión del Juzgado de Instrucción número 4 de Sagunt.

La detección de la documentación falsa ha sido posible gracias a los filtros de prevención establecidos por las unidades antiterroristas para detectar posibles células yihadistas en suelo europeo.

Tras seguir el rastro a las documentaciones fraudulentas, los agentes del servicio de Información descartaron que la trama tuviese conexiones con el yihadismo, por lo que el asunto pasó a investigarse como un caso de delincuencia común.

Agentes del grupo de Homicidios se sumaron entonces al caso, al tratarse de un delito contra los derechos de los trabajadores. La gran mayoría de los 'novios' son hombres llegados desde India que buscaban de esta manera disponer de documentación europea legalizada para poder optar a contratos de trabajo legales, así como atención sanitaria y otros tipos de ayudas públicas.

Además, una vez tramitado el NIE como intracomunitario, podían moverse libremente por todo el territorio de la Unión.

Quienes accedían a casarse eran principalmente mujeres rumanas, y por tanto europeas de pleno derecho, en situación económica precaria, que percibían una pequeña parte del dinero que se quedaban los cabecillas de la organización.

Entre 12.000 y 15.000 euros

Según ha podido saber este diario de fuentes jurídicas, los extranjeros que buscaban regularizar su situación llegaron a pagar entre 12.000 y 15.000 euros a la mafia ahora desarticulada, cuyos jefes, también detenidos, se quedaban la mayor parte del dinero tras pagar una pequeña cantidad a las mujeres que cedían su documentación para falsificar los certificados de matrimonio que les servían de base para conseguir los NIE y el resto de documentos legales, así como a los especialistas en falsear esos papeles.

Una vez localizados e identificados los cabecillas, las mujeres que se prestaron a ceder sus NIE legales y los compradores, los investigadores planificaron la intervención final, que se produjo a primera hora de la mañana de ayer, con el apoyo de los especialistas en asaltos del grupo de reserva y seguridad (GRS) y de la unidad de seguridad ciudadana (Usecic) de la Comandancia de València.

Decenas de agentes se desplegaron en el entorno de los domicilios alrededor de las seis de la madrugada y accedieron de manera simultánea al interior para detener a los sospechosos y registrar las viviendas. En València hubo registros y detenidos en el número 60 de la calle Nicasio Benlloch y en el 6 de la calle Constitución. Pese a lo temprano, muchos vecinos se congregaron en los alrededores para ver la actuación policial.

El resto del dispositivo se desplegó en dos puntos de la ciudad de Alicante, así como en una barriada de Elda. Los agentes han intervenido abundante documentación en distintos soportes, así como material informático y elementos de los utilizados habitualmente en los laboratorios de falsificación de documentos.