El rostro de los autores del millonario robo al cantante Daddy Yankee en un hotel de València al descubierto. Al menos tres presuntos miembros de la banda de ladrones de guante blanco que desvalijaron la caja fuerte del artista puertorriqueño el pasado mes de agosto, tras colarse uno de ellos en su habitación del hotel Meliá y conseguir que uno de los propios trabajadores le abriera la caja, aparecen en las grabaciones de las cámaras de seguridad del establecimiento, a las que ha tenido acceso INFORMACIÓN.

La reproducción de las imágenes captadas por la videovigilancia del hotel permite reconstruir paso a paso cómo los delincuentes, que todavía no han sido identificados por la policía, se apoderaron de un botín de dos millones de euros en joyas - cadenas de oro y diamantes y relojes de lujo - y 2.500 dolares en efectivo, el pasado 6 de agosto de 2018.

En el vídeo - que se puede visualizar en la web de INFORMACIÓN - se ve claramente al joven que se hizo pasar por Daddy Yankee entrando en la habitación del cantante con una mochila negra, y saliendo tan tranquilo media hora después con su botín, sin importarle esperar casi un minuto frente a la puerta del ascensor, donde estaba enfocada precisamente la cámara de seguridad.

Aunque la nitidez de las imágenes deja mucho que desear, sí se puede apreciar la naturalidad con la que el sospechoso, con gafas, pantalón vaquero y camiseta de manga corta, camina por el pasillo, se sitúa de espaldas a la videocámara y, tras subirse el pantalón, se mete las manos en los bolsillos o revisa el teléfono móvil como si fuera un cliente más.

Previamente, a las cinco de la madrugada anterior, otro presunto miembro de la banda, también captado en este caso por la cámara de la puerta giratoria de la entrada principal del hotel, acude a la recepción, con pantalón corto y zapatillas, y solicita un duplicado de la llave de la habitación del cantante de reguetón, fingiendo ser personal de seguridad del artista.

Controlan sus movimientos

Minutos antes de las cinco de la tarde otro supuesto cómplice, con camisa blanca merodea por la recepción para controlar los movimientos de Daddy y de su equipo de guardaespaldas. Una vez se van se acerca al recepcionista como si fuera uno más de ellos.

Una hora más tarde, a las 17.54 horas, el autor material del robo sube a la planta 28, que había reservado en su totalidad el cantante por cuestiones de seguridad, y se cuela en su habitación con el duplicado de la llave que ya le había entregado su compañero con anterioridad.

Después de permanecer diez minutos en el interior telefoneó a recepción, identificándose como el famoso cliente, y diciendo que tenía problemas para abrir la caja fuerte. Así uno de los empleados del hotel sube y tras varios minutos hablando por teléfono en el pasillo de dicha planta, entra y le abre la caja solucionando el supuesto problema del cliente.

A las 18.16 horas el ladrón abandona esta habitación y entra en la de enfrente, también alquilada por el staff del coautor de la exitosa «Despacito». A las 18.25 horas, haciendo honor a la canción, sale sin prisas y se dirige al ascensor. En la mochila se lleva los collares de oro y diamantes que el artista, que había viajado para actuar en Gandia solía lucir en sus conciertos.

Los abogados del famoso cantante puertorriqueño, del despacho Pont & Sampedro de València, van a presentar una demanda contra el hotel Meliá en el que se alojó para reclamar la responsabilidad civil al establecimiento hotelero por no haber velado por la seguridad de los bienes materiales que el cliente había depositado en la caja fuerte de su habitación. De hecho consideran una gran irresponsabilidad haber abierto la caja sin comprobar su identidad, más aún teniendo en cuenta que el ladrón no guarda ningún parecido con Daddy Yankee.