Un trágico accidente se cobró ayer la vida de un niño de tan solo 8 años que se precipitó al vacío desde una ventana de su domicilio en Alicante, situado en un quinto piso de un edificio situado en el Pau II. El SAMU le practicó maniobras de reanimación cardipulmonar, pero desafortunadamente no pudo salvarle la vida al pequeño.

El accidente se produjo sobre las seis de la tarde en un edificio situado en la calle Cardenal Francisco Álvarez número 1 de Alicante. El propio padre fue quien dio la voz de alarma y bajó rápidamente al interior de la urbanización donde cayó su hijo.

En unos minutos ya había en el lugar varias patrullas de la Policía Local y Policía Nacional, así como una ambulancia del SAMU.

Los servicios de emergencia desplazados al lugar trataron de dar ánimos al padre del niño mientras los sanitarios luchaban por su vida. Sin embargo, el fatal desenlace se conoció posteriormente tras los intensos esfuerzos del equipo médico del SAMU para salvar al menor.

Una vez el SAMU certificó el fallecimiento, la Policía Nacional comunicó su muerte al juzgado de guardia para que la comisión judicial acudiera al lugar del accidente. También se personaron agentes de la Policía Judicial y Policía Científica para inspeccionar la zona y recabar datos para determinar cómo se produjo la caída del niño.

Lamentable accidente

Fuentes policiales indicaron que los primeros indicios apuntaban a que se trata de un lamentable accidente que le costó la vida al menor tras caerse por una ventana que estaba un poco abierta en el domicilio donde estaba con su padre.

Sobre las siete y media de la tarde llegó el furgón funerario y poco después se procedió al traslado del cuerpo del pequeño al Instituto de Medicina Legal, donde hoy se le practicará la autopsia.

Vecinos de la zona que vieron llegar numerosos coches policiales al lugar indicaron que en los primeros momentos se escucharon gritos de algún agente que repetía «¡No, no!», presumiblemente por la corta edad de la víctima del accidente.