El considerado por la Guardia Civil como líder de la Manada de Callosa d'en Sarrià acusada de la violación múltiple de una joven de 19 años en una vivienda en Nochevieja, Joffre G.T., de 22 años, fue condenado recientemente a una pena de 31 días de trabajos en beneficio de la comunidad por un delito de violencia de género a una expareja y aún tiene pendiente un juicio por abusos sexuales a una menor, según fuentes judiciales.

Esta condena a trabajos comunitarios por un delito de lesiones en el ámbito familiar, que aún no ha cumplido al estar pendiente de ser requerido para ello, se suma a otra anterior, de mediados de 2017, por un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, según las mismas fuentes. La sentencia, fechada el pasado noviembre, le impuso también la prohibición de tener armas durante dos años y la prohibición de acercarse a la víctima o comunicar con ella durante dos años. La orden de alejamiento concluyó el pasado diciembre con la liquidación de la condena, según la abogada defensora, Miriam Santamaria, que llegó a un acuerdo de conformidad con las partes acusadora.

Además de la condena por malos tratos, Joffre tiene otras penas leves por quebrantamientos de una orden de alejamiento relacionadas con esa misma expareja, una joven de 20 años que ayer remitió una carta a «El programa de Ana Rosa» donde asegura que le puso «17 denuncias» y que era «una relación muy tóxica».

Según recoge la web del programa televisivo, la expareja de Joffre escribe en la carta que sufrió varias agresiones del líder de la Manada y relata que «cuando tenía 15 años vivía en Benidorm. Yo empecé a salir con este chico y vivíamos en casa de sus padres. Convivía con ellos y fueron testigos. Me agredió delante de sus padres y sus dos hermanos en el bautizo de uno ellos».

La expareja del líder de la Manada asegura en su carta que le rompió una pieza bucal en la agresión y afirma que «de ello hay vídeos y tengo imágenes de los ojos morados y más lesiones».

La Guardia Civil detuvo a los cuatro jóvenes la semana pasada

En la carta enviada a «El programa de Ana Rosa» señala que «me mudé a otro lugar hace cuatro años porque me dio una paliza que casi me mata» y afirma que «llevo cuatro años de juicios y no he conseguido nada, lo único remover todo. Le denuncié por violencia de género y por acoso. Después otra vez porque se saltó una orden de alejamiento». Antes de concluir la carta la víctima se refiere a secuelas psicológicas y «asegura que no le sorprende la presunta violación que su expareja habría cometido junto a sus amigos, indica el programa que recibió el escrito.

La abogada defensora de Joffre, Miriam Santamaria, declaró ayer a este diario sobre las denuncias a las que hace referencia la expareja en su carta que la mayoría «se trata de quebrantamientos de la orden de alejamiento por la propia víctima». Todas las denuncias, según la abogada, fueron «presentadas por la madre y ella no se presentó a los juicios».

La sentencia que recoge la "paliza" a la que se refiere la expareja de Joffre declara como hechos probados que a las tres de la madrugada del 6 de julio de 2015 el acusuado estaba con su pareja, menor de edad, en el hotel La Marina de Benidorm y durnate una discusión "le propinó un bofetón en la mejilla y una patada en el muslo derecho".

Cooperador

El abogado que ejercer la acusación particular en nombre de la joven agredida en Nochevieja, Francisco González, va a solicitar a la juez de La Vila que investiga el caso que investigue también al inquilino del piso de Benidorm donde comenzaron los abusos al considerar que es cooperador de los hechos por omisión al no haber llamado a la Policía, lo que habría evitado la posterior violación múltiple. Este vecino auxilió a la chica cuando descubrió que dos de los sospechosos estaban abusando de ella en el cuarto de baño y tras echar de la casa a los ahora encarcelados ayudó a la joven y poco después la acompañó hasta la calle, donde les esperaban los miembros de la Manada y se marchó con ellos.

Uno de los testigos de la agresión en Benidorm relata lo que pasó aquella noche

Por otro lado, la defensa de dos de los cuatro detenidos por la violación múltiple de la joven de 19 años ha recurrido su encarcelamiento y ha pedido su puesta en libertad provisional al considerar que no existe «riesgo de fuga ni de reiteración delictiva», según explicó ayer a este diario su abogado defensor, Joaquín Ródenas.

El abogado de los dos jóvenes de 19 y 24 años ha presentado ante el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de La Vila Joiosa un recurso de reforma y subsidiario de apelación ante la Audiencia Provincial contra el auto de prisión provisional acordado el pasado viernes por la juez que investiga a la Manada de Callosa.

Por su parte, la abogada del joven de 22 años, Miriam Santamaría, y la letrada del joven de 21 no han recurrido el ingreso en prisión de sus clientes por el momento, aunque no lo descartan conforme avance la instrucción del caso.

Dos de los cuatro jóvenes piden que les dejen en libertad

Nueva declaración

El joven de 19 años encarcelado por la agresión sexual de Nochevieja ha solicitado asimismo comparecer ante la juez de forma voluntaria para ampliar su declaración del pasado viernes al pasar a disposición judicial.

Este joven, que está en la prisión de Villena al tener menos de 21 años, solo declaró a las preguntas de su abogado defensor, Joaquín Ródenas, quien desconoce el contenido de la nueva declaración de su cliente. Este y otros dos detenidos solo contestaron a las preguntas de sus abogados, mientras que el joven de 22 años fue el único que respondió a las preguntas de la Fiscalía y del resto de abogados.

Los investigadores del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de La Vila Joiosa continúan mientras tantos sus pesquisas sobre los hechos y siguen buscando a nuevas víctimas y a un varón que figura en una de las tres nuevas denuncias por agresiones sexuales que se han presentado contra el joven de 22 años.