La secretaria de Estado de Seguridad, Ana María Botella, ha nombrado al coronel José Hernández Mosquera como nuevo jefe de la Comandancia de Alicante en sustitución de Manuel Muñoz, que pasó a situación de reserva en julio del pasado año. Desde entonces el teniente coronel Francisco Rodríguez Lorenzo, segundo jefe del Instituto Armado en la provincia, había estado provisionalmente al frente de la Benemérita de Alicante a la espera de que el Ministerio del Interior cubriera la plaza.

El nuevo máximo responsable de la Guardia Civil en la provincia de Alicante procede de la Comandancia de Almería, donde ha prestado servicio como jefe de Operaciones y se encargó de dirigir la búsqueda e investigación del niño Gabriel Cruz, asesinado por la pareja del padre del menor. El nombramiento de Hernández Mosquera apareció publicado ayer en el Boletín Oficial de la Guardia Civil.

Hernández Mosquera procede de una familia muy vinculada con el Instituto Armado. Su padre fue miembro de la Guardia Civil, al igual que otros dos de sus hermanos. Su hermano Alejandro Fernández Mosquera acaba de ser nombrado responsable del Cuerpo en Baleares, es experto en la lucha antiterrorista y durante los últimos seis años fue jefe de seguridad de Mariano Rajoy mientras era presidente del Gobierno. Su otro hermano, el coronel Juan Hernández Mosquera, que además es su mellizo, también es un experto en la lucha antiterrorista.

José Hernández Mosquera ascendió el mes pasado a coronel de la Guardia Civil y era jefe de Operaciones de la Comandancia de Almería. Hernández Mosquera es una figura crucial para entender el recorrido de la Guardia Civil en Almería en la última década. Según ha publicado La voz de Almería recientemente, ocupó el mando accidental del Instituto Armado en la provincia en 2006, hasta el nombramiento del entonces teniente coronel jefe Francisco Jiménez Rodríguez, y ha ejercido durante estos años la representación de la institución en periodos puntuales.

La trayectoria profesional del nuevo responsable de la Comandancia alicantina ha estado hasta ahora muy ligada a la provincia de Almería, donde ha estado de forma interina al mando del Instituto Armado en tres ocasiones, en 2009, en 2017 y en 2018. En la última ocasión, fue el rostro visible de la Comandancia durante la investigación de la desaparición del niño Gabriel Cruz y que culminó con la detención de Ana Julia Quezada como presunta autora del asesinato del niño, un suceso que tuvo conmocionada a toda la provincia de Almería y toda España.

Como jefe de Operaciones estuvo directamente implicado en investigaciones como el crimen de la pequeña Míriam Cuerda en Abrucena o el crimen de Cascapolos en Gérgal. Fue capitán de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial (UOPJ) y luego jefe de Operaciones, primero como comandante y luego como teniente coronel, siempre como número dos de la Comandancia de Almería, aunque puntualmente estuvo de jefe accidental de la Guardia Civil.