Dos hombres de 36 y 41 años fallecieron el pasado fin de semana en Alicante y en La Vila Joiosa a causa de sendos atragantamientos sufridos cuando comían. Uno perdió la vida al atragantarse con un trozo de carne que ingirió en un céntrico restaurante de Alicante donde trabajaba como camarero y el otro se atragantó con una mezcla de alimentos que tomó mientras comía con su hermano en una vivienda de La Vila.

El fallecimiento del camarero se produjo el pasado sábado en el Hospital General de Alicante tras quedar en coma tras el atragantamiento que sufrió el jueves por la tarde. Según informaron ayer fuentes policiales, la Policía Nacional fue alertada poco antes de las seis de la tarde para desplazarse a un restaurante de la avenida Alfonso El Sabio porque había una persona que se había atragantado mientras comía.

Los agentes que llegaron al local comenzaron a realizar maniobras de reanimación hasta que poco después se personó una ambulancia del SAMU y el personal sanitario continuó con la asistencia. El trabajador atragantado fue trasladado en estado muy grave al Hospital General de Alicante, donde estuvo ingresado hasta su fallecimiento el pasado sábado.

Desde la empresa que gestiona el restaurante indicaron ayer que están muy afectados «por la inesperada» muerte. Sobre el atragantamiento indicaron que sus compañeros llamaron a una ambulancia y pidieron ayuda en una farmacia que hay junto al restaurante.

El fallecido se llamaba Adrián Martí Giménez y su funeral se celebrará esta mañana en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Sax, de donde era natural. Adrián era miembro de una familia conocida en Sax que siempre se ha dedicado a la hostelería pero residía fuera de la localidad desde hacía tiempo, informa Pérez Gil.

El segundo atragantamiento mortal tuvo lugar el pasado domingo en una vivienda de la calle Quintana de La Vila Joiosa. Un hombre de 41 años estaba comiendo con su hermano y se atragantó al ingerir una mezcla de varios alimentos, al parecer pollo y pan. El hermano fue quien avisó a emergencias sobre las tres de la tarde y aunque se personó una ambulancia el equipo sanitario no pudo reanimar al hombre y confirmó el fallecimiento, por lo que la Guardia Civil de La Vila Joiosa comunicó su muerte al juzgado de guardia y sobre las 16.20 horas se ordenó el levantamiento del cadáver.

Otras dos trágicas muertes

Estos dos fallecimientos se producen días después de la muerte de un niño de 3 años que se atragantó comiendo las uvas en Nochevieja y de una mujer en Lugo a causa de un polvorón.

Según ha publicado El País, la asfixia por atragantamiento -2.336 fallecidos en 2017- es la tercera causa de muerte no natural en España por delante de los accidentes de tráfico y por detrás de los suicidios (3.679) y caídas accidentales (3.057), según el Instituto Nacional de Estadística.