La Policía Nacional ha detenido a tres personas, entre ellas un matrimonio propietario de dos clubes de alterne de l'Alfàs del Pi y Alicante, en una operación contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual que ha permitido liberar a tres víctimas que estaban siendo prostituidas.

El matrimonio que regentaba los dos clubes de alterne investigados ha ingresado en prisión provisional tras ser acusado por la Policía de explotar sexualmente a las víctimas e intercambiarlas «sin ningún tipo de escrúpulos» en los locales que dirigían.

El tercer arrestado quedó en libertad provisional y la Policía Nacional intervino en tres registros más de 91.000 euros y joyas de gran valor que los acusados ocultaban en los retretes y otros escondites que tenían en un lujoso chalet donde residía el matrimonio encarcelado.

Según informó ayer la Dirección General de la Policía, las pesquisas policiales se iniciaron en febrero del pasado año cuando los investigadores detectaron dos organizaciones criminales que se estaban dedicando al tráfico de personas desde África para prostituirlas en España. Las redes captaban a las víctimas en Nigeria y desde allí las trasladaban hasta Libia, donde eran enviadas hacia Italia en embarcaciones con apenas sistemas de navegabilidad y seguridad.

Cuando lograban llegar a Italia otros miembros de la organización se encargaban de su traslado hasta Benidorm. Una vez llegaban a su destino final las jóvenes eran informadas de que habían contraído una deuda con la red y debían saldarla ejerciendo la prostitución. Para ello las conducían hasta sendos clubes de alterne de l'Alfàs del Pi y Alicante, donde los traficantes de personas se reunían con el dueño para mostrarles las chicas y si accedía empezaban a ejercer la prostitución ese mismo día.

Instrucciones

Las instrucciones de los tratantes al dueño y porteros de los clubes eran tajantes. No debían entregar a las chicas ni un sólo euro del dinero que ganaban ejerciendo la prostitución, sino a ellos directamente.

Las víctimas estaban completamente aisladas debido a la barrera idiomática y eran prostituidas durante todos los días de la semana en los dos clubes, donde permanecían en condiciones de vulnerabilidad.

Según la Policía, la investigación reveló que el matrimonio propietario de los dos clubes bajo sospecha se beneficiaba del ejercicio de la prostitución de jóvenes víctimasde trata de seres humanos, así como de otras mujeres en situación administrativa irregular.

Esta actividad generaba al matrimonio unos elevados ingresados que ocultaban bajo un entramado empresarial creado para el blanqueo de capitales.

La Policía Nacional realizó registros en los dos clubes y en un chalet del matrimonio. Los agentes intervinieron gran cantidad de documentación que acredita una contabilidad paralela de los pagos realizados por las mujeres que ejercían la prostitución.

Los agentes llevaron a cabo los registros con un perro adiestrado en detección de dinero y en el interior del lujoso chalet localizaron más de 91.000 euros escondidos en diferentes paquetes localizados en los retretes y sanitarios, caja fuerte y otros lugares, como debajo del jacuzzi, donde encontraron joyas de gran valor.

Entre el dinero incautado por la Policía en el chalet de los detenidos había un total de 91.501 euros, 2.250 libras esterlinas, 490 libras y 20 dólares estadounidenses.

La Dirección General de la Policía indicó en un comunicado que esta operación se enmarca dentro del plan de la Policía Nacional contra la trata de seres humanos con fines de explotación Sexual.

La Policía Nacional cuenta con la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para «facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delito, no quedando reflejada la llamada en la factura telefónica», señala el comunicado policial.