La Policía Nacional ha detenido en Alicante a siete comerciales de una empresa telefónica acusados de falsificar contratos con el objetivo de cobrar las comisiones que les ofrecía la compañía por cada alta. Las falsificaciones fueron realizadas mediante la manipulación de los documentos de identidad de clientes que ya tenía la empresa y por el momento los investigadores de la Comisaría de Distrito Centro de Alicante han detectado hasta dieciocho documentos manipulados.
Las pesquisas policiales se iniciaron a raíz de la denuncia presentada por el gerente de una compañía telefónica que alertó a la Policía Nacional de irregularidades en contrataciones realizadas en su empresa, donde advirtió anomalías en algunos documentos de identidad de varios clientes.
Documentación
Los investigadores analizaron la documentación aportada por la empresa denunciante y comprobaron que siete comerciales de la compañía que trabajaban en la zona de Alicante realizaron presuntamente contratos fraudulentos.
Para ello, manipulaban diferentes aspectos de los DNI de los clientes sin que estos supieran nada y con las nuevas contrataciones lograban una comisión de la empresa.
Según informó ayer la Comisaría Provincial, los investigadores detectaron 18 documentos alterados, de los cuales 14 aparecían con algún dígito del DNI modificado. Con este simple sistema el comercial formalizaba una contratación fraudulenta a un nuevo cliente sin que este se diera cuenta. El engaño lo descubría la víctima cuando le cobraban el servicio telefónico que ella nunca había contratado.
La Policía detectó en otras cuatro contrataciones fraudulentas que se había modificado el año de nacimiento del DNI de algún cliente de la compañía para formalizar nuevas altas con el fin de obtener la correspondiente comisión que les ofrecía la compañía.
Los agentes de la Comisaría de Distrito Centro procedieron a detener a siete personas que trabajaban como comerciales como acusadas de un delito de falsedad documental.
Los arrestados son seis hombres y una mujer de entre 20 y 43 años. Los detenidos, de nacionalidad venezolana, argentina y española, pasaron a disposición judicial y quedaron en libertad provisional.
