La Guardia Civil ha detenido a cuatro ciudadanos ingleses de entre 31 y 64 años en Guardamar, Rojales y Los Montesinos acusados de formar parte de un grupo dedicado a la producción y distribución de estupefacientes, como la droga de la alta sociedad, a compatriotas británicos que residen en Benidorm y la encargaban previamente.

En la operación, realizada por la Guardia Civil de Crevillent y Guardamar, se han desmantelado tres cultivos «indoor» de marihuana y se han incautado de 250 plantas de marihuana, seis kilos de cannabis envasado y 250 gramos de Tucibi o cocaína rosa, la conocida como droga de la alta sociedad. Asimismo, los agentes les intervinieron una pistola detonadora con munición, 10.000 euros en efectivo, dos vehículos, una embarcación y se ha embargado un chalet.

Los cuatro arrestados han ingresado en prisión sin fianza tras pasar a disposición judicial del juzgado de Instrucción número 1 de Torrevieja. Además se ha cursado una orden internacional de búsqueda y detención de otro británico integrante de la misma organización.

Según la Comandancia, las pesquisas se iniciaron en septiembre después de que unos agentes presenciaran una descarga sospechosa de varios sacos de compost en un chalet de Los Montesinos. Ante las sospechas de que el destino fuera un cultivo de marihuana se realizaron indagaciones que permitieron averiguar que desde la vivienda salían vehículos casi a diario con droga en pequeñas cantidades y su destino final era Benidorm.

Los sospechosos pusieron en marcha en Guardamar y Rojales otras dos plantaciones de marihuana de la variedad «Monster», cuyo crecimiento es más rápido y puede producir el doble que cualquier otro tipo de marihuana.

El grupo estaba liderado por un británico considerado por la Guardia Civil como «extremadamente peligroso». En su casa le incautaron una pistola detonadora y 250 gramos de Tucibi, la llamada cocaína rosa o droga de la alta sociedad. Se trata de una droga sintética y disponía de capsulas vacías para introducir el polvo rosa una vez recibían encargos de consumidores. A los detenidos les acusan de delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, blanqueo y falsedad documental.