Estuvo escondido de la Justicia durante cerca de diez años, que le buscaba por la muerte de un joven ecuatoriano durante una pelea a navajazos. La Guardia Civil no cejó en su búsqueda y finalmente le encontró en Torre-Pacheco (Murcia), donde se ocultaba usando la identidad de su hermano. En el momento de su arresto, faltaban cinco años para que el homicidio estuviera prescrito. Un jurado popular le juzga desde hoy en la Audiencia Provincial de Alicante. Pero el proceso cuenta con un escollo, la mayoría de los testigos no han podido ser localizados. Se trata de otros jóvenes de nacionalidad ecuatoriana del entorno del acusado y de su víctima y que hace años que regresaron a sus países.

De todas maneras, en su día, la Guardia Civil informó de la recogida de restos biológicos tanto del sospechoso como de su víctima en la escena del crimen. El jurado decidirá si hay pruebas o no suficientes para poder condenar al sospechoso, que está en prisión preventiva desde su detención en julio del año pasado.

Los hechos ocurrieron sobre la medianoche del 7 de julio de 2008 en la calle Doctor Fleming de Novelda. El escrito de acusación del fiscal relata que el procesado y su víctima, ambos de nacionalidad ecuatoriana, se enzarzaron en una discusión. Una certera puñalada en la zona intercostal acabó con la vida del joven de manera casi inmediata. La víctima contaba con 19 años de edad en el momento de su muerte. El presunto agresor intentó darse a la fuga, pero otro joven intentó retenerle. La respuesta de éste fue la de agredirle con la navaja, causándole heridas leves en un brazo.

La Fiscalía reclama para él una pena de catorce años por un delito de homicidio. Las lesiones del otro joven fueron de carácter leve, por lo que han quedado despenalizadas en la última reforma del Código Penal. El fiscal pide que el acusado pague también una indemnización de 103.390 euros para la mujer del fallecido y de 17.230 euros para los padres de éste. Asimismo para el joven acuchillado en el brazo de reclama una indemnización de 1.100 euros por las lesiones sufridas.

Fuga

Desde la misma noche del crimen, el procesado estuvo en paradero desconocido. En el domicilio del posible autor se encontró su pasaporte que fue intervenido para evitar su huida, siendo emitida una orden de búsqueda internacional. Igualmente, los agentes recabaron numerosos declaraciones de sus familiares, amigos y conocidos para dar con el huido. La Guardia Civil cree que durante los primeros años estuvo escondiéndose por diversas ciudades españolas, hasta que finalmente se afincó en Torre-Pacheco con la identidad de su hermano. La pista que contribuyó a su arresto fue cuando los agentes averiguaron en el año 2014 que el hermano del sospechoso había denunciado la pérdida de su pasaporte en la misma época en que se produjo el homicidio. Los investigadores se encontraron con que el hermano había regresado a Ecuador, pero aparecía dado de alta en una empresa agrícola sita en Torre-Pacheco.

En el momento de la detención, los agentes le intervinieron el pasaporte a nombre del hermano con su foto, un documento que era original, porque consiguió renovarlo en su día a pesar de que tenía la foto alterada.

En el momento de su arresto, el sospechoso tenía 34 años y había rehecho su vida asumiendo la falsa identidad. En caso de que no hubiera sido localizado el procedimiento habría prescrito en el año 2022.

En poco menos de un año, el juzgado de Novelda ha completado la instrucción y ha mandado la causa a la Audiencia a juicio. La vista oral ya estuvo ya señalada el mes pasado, pero tuvo que suspenderse a causa de la huelga que iniciaron los funcionarios de prisiones, al no estar garantizado que el detenido pudiera ser trasladado de Fontcalent a la Audiencia.

Las fuentes consultadas por este diario señalaron que en este caso, en el supuesto de que el acusado fuera condenado, no podrían aplicarse atenuantes por las dilaciones indebidas del proceso debido a que ha sido la fuga de éste la que ha tenido paralizado el procedimiento estos años. Una vez que fue arrestado, el juzgado ha cerrado la instrucción en menos de un año.

La vista comenzará hoy con la selección del jurado y la declaración del acusado. Mañana será el momento de la declaración de los testigos que hayan podido ser citados y, por último, el jueves se deliberará el veredicto.