La Policía Nacional detuvo a primera hora de ayer bajo la acusación de actividad terrorista islamista a un vecino de Sagunt (Valencia) de 46 años y nacionalidad marroquí, con antecedentes por tráfico de drogas. El sospechoso, que vivía desde hacía años con su mujer y sus hijos en una vivienda del barrio Bajo Vías, está acusado de los delitos de integración en organización terrorista, adoctrinamiento, enaltecimiento del terrorismo, contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal. A finales de octubre la Policía Nacional apresó a otros presuntos yihadistas en Cocentaina y Alaquàs.

La operación contra el último sospechoso, que pretendía viajar a Siria para unirse a un grupo terrorista de la esfera de Al Qaeda, ha sido desarrollada por agentes de la Comisaría General de Información, en una operación conjunta con la Comisaría General de Policía Judicial, la Brigada de Información de València y la comisaría de Sagunt.

Según fuentes policiales, el detenido «había sufrido un proceso muy acusado de radicalización» en los últimos tiempos, lo que le llevó a transformar muchos de sus hábitos y costumbres de su vida diaria para cumplir con los preceptos más rigoristas del salafismo radical.

Además, en su actividad online el arrestado se convirtió en un gran consumidor de material multimedia yihadista, en el que se ensalzaban acciones violentas cometidas en zonas de conflicto. Asimismo realizaba constantes alusiones en sus publicaciones, de manera abierta y pública, acerca de la yihad, sus mártires y su deseo de convertirse en uno de ellos mediante una acción terrorista.

Más de mil seguidores

Los perfiles de las redes sociales que manejaba el detenido sufrieron un considerable aumento cuantitativo, pasando de unos pocos seguidores en un principio hasta llegar a sobrepasar el millar, pudiendo llevar a cabo esta persona una gran labor de radicalización, tanto activa como pasiva, así como el posible reclutamiento de otros individuos.

A raíz del notable aumento de su actividad virtual en los perfiles de redes sociales que poseía, se constató un elevado nivel de radicalización. El detenido elogiaba constantemente la yihad violenta y se convirtió en seguidor de perfiles de organizaciones e individuos terroristas.

Así las cosas, los investigadores se desplazaron la semana pasada a València y planearon la detención para esta semana, ante el temor de que el sospechoso se fuese en cualquier momento, lo que suponía un riesgo real para la seguridad nacional, asegura la Policía.

Viaje inminente a Siria

De hecho, el paso definitivo que puso a la Policía en máxima alerta fue ponerse en contacto con un integrante de la organización terrorista Frente Jabhat Al Nusra, al que manifestó su firme voluntad de viajar a Siria para luchar y hacer la yihad.

La otra cara de este individuo es la que tiene que ver con sus actividades relacionadas con el narcotráfico. Ante las dificultades económicas que le surgieron para poder desplazarse a territorio de conflicto, volvió al tráfico de estupefacientes para financiar en poco tiempo su periplo hasta la zona de combate.

Así, en el operativo de ayer, que mantuvo cerrado a cal y canto el barrio Bajo Vías de Sagunt entre las 4.00 y las 8.30 horas -la policía no dejó entrar ni salir a nadie, e incluso los responsables del dispositivo fueron llamando uno a uno a los centros de trabajo de cada persona que pretendía irse para advertir de que estaban retenidos dentro del precinto policial- fueron detenidas otras dos personas más de nacionalidad marroquí, por presuntos delitos contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal por sus actividades relacionadas con el tráfico de estupefacientes.

El principal detenido, un conocido traficante detenido antes en varias ocasiones por delitos comunes, «convivía en un entorno en el que se sentía protegido, tomaba numerosas medidas de seguridad en sus desplazamientos y comunicaciones para poder llevar de forma paralela sus actividades terroristas y las relacionadas con el narcotráfico», según la Policía.

La investigación ha sido supervisada por el Juzgado Central de Instrucción número 6 y coordinada por la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Fuentes policiales explicaron que, durante la operación llevada a cabo ayer, los agentes, que contaron con la colaboración del Grupo Especial de Operaciones (GEO) desplazado desde su sede en Guadalajara, llevaron a cabo siete registros.