La Audiencia de Alicante ha impuesto penas que suman quince años y medio de cárcel a Brian Colin Charrington, más conocido como el narco de la Wikipedia, según la sentencia que se ha notificado a última hora de esta mañana. El fallo le condena a 12 años por el envío de más de 200 kilos de cocaína desde Venezuela a la provincia de Alicante y que fueron intervenidos en un chalé en El Albir (L'Alfàs del Pi), así como otros tres años y medio de prisión por el blanqueo del dinero obtenido por el tráfico de drogas. Charrington ha recibido el apodo del narco de la Wikipedia por contar con una ficha en dicha página en la que aparece pormenorizado su historial delictivo. Junto a Charrington, ha sido condenado a doce años su lugarteniente por el envío; diez años para el capitán del barco que transportó la droga; y tres años y medio para su hijo acusado de ayudarle a blanquear el dinero. Asimismo absuelve a otros cinco acusados por estos hechos. El juicio quedó visto para sentencia el pasado mes de mayo.

Los hechos se remontan a noviembre de 2012 cuando la Policía investigaba a la red de Charrington cuando preparaba el envío de un alijo de cocaína desde Venezuela hasta España en una embarcación. La sala declara probado que Brian Colin Charrington era el propietario de los 192 kilos de cocaína decomisados en una vivienda de El Albir y que era el jefe de la organización que gestionó el envío de veleros a Sudamérica para traer cocaína a España. La Sección Décima de la Audiencia ha desestimado las peticiones de nulidad de las escuchas telefónicas en las que se apoyó la investigación.

La sala considera probado que Charrington carecía de actividad laboral reconocida adecuada por su volumen y calidad para producir ingresos correspondientes al patrimonio que detentaba, disponiendo vehículos de alta gama, saldos en cuentas corrientes, dinero en efectivo y embarcaciones. Su hijo, Ryan Charrington, regentaba tres agencias de compraventa de divisas que, según el fallo, eran utilizadas por la organización para blanquear los beneficios de su actividad delictiva. Para los magistrados, ha quedado acreditado que el propietario real de dichas oficinas era Brian Colin.