Los miembros de una banda han aceptado hoy penas de hasta 15 años de prisión por traficar con drogas y cometer tres robos en Alcoleja, en uno de los cuales una anciana de 90 años resultó muerta por asfixia.
Esas condenas han sido ratificadas y declaradas firmes por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, durante la primera sesión del juicio, tras el acuerdo al que han llegado la fiscalía y los abogados de los ocho acusados.
Las penas impuestas, entre los dos y los 15 años, suponen una rebaja considerable respecto a las solicitadas inicialmente por el ministerio público, que en alguno de los casos superaba los 40 años de cárcel.
La banda cometió un primer robo la noche del 29 de septiembre de 2011 en una carnicería ubicada en la calle San Joaquín de Alcoleja, donde la propietaria fue maniatada y amordazada y los asaltantes obtuvieron un botín superior a los 7.000 euros.
El 16 de febrero del siguiente año, los ladrones regresaron a la localidad y, en ejecución de un plan previo, asaltaron la vivienda de Teresa Ivorra Molla, de 90 años, en la plaza del Palacio del mismo pueblo.
La anciana se encontraba en esos momentos junto a su cuidadora y ambas fueron inmovilizadas en el suelo, amordazadas, agredidas e intimidadas con un arma blanca para que revelaran dónde escondían el dinero y las joyas.
A la nonagenaria le pusieron un trapo en la boca y su cuerpo sometido a una gran presión, de tal manera que sufrió la fractura de una costilla y acabó falleciendo por asfixia.
"Los acusados actuaron con la intención de ejercer la violencia que fuera necesaria, aun sabedores de las consecuencias nefastas que sus actuaciones podían conllevar en la salud de una mujer de tan avanzada edad", señala el fiscal en su escrito de acusación.
Los asaltantes se hicieron con unos 1.900 euros en efectivo, algunas joyas de oro, un reloj y una videocámara, y huyeron de la vivienda.
Uno de los ladrones cometió un nuevo robo en otra casa de Alcoleja el 13 de mayo de 2012, en el que se apoderó de diversos aparatos electrónicos y algunas prendas de ropa.
Además, cinco de ellos participaron en la introducción en España de un alijo de casi 2,7 kilos de cocaína procedente de Colombia que había sido camuflado en el interior de bombones.
La fiscalía atribuía inicialmente a siete de los ocho acusados -todos están en libertad provisional por esta causa- el crimen de Teresa Ivorra, pero ha retirado hoy esa acusación para dos de ellos, que forman un matrimonio.
Los cinco implicados a los que el acusador ha culpado finalmente de esa muerte han sido condenados por un homicidio doloso a cinco años de prisión, cuando se enfrentaban inicialmente a peticiones de 13 o 15, según cada caso.
Las penas por los demás delitos que cometieron tanto ellos como los otros tres encausados también han sufrido importantes rebajas por la aplicación, en su grado máximo, de la atenuante de dilaciones indebidas, derivada de la demora judicial al tramitar el sumario.
Así, los robos con fuerza o con violencia son castigados con dos años de cárcel, en lugar de cinco años, la pertenencia a grupo criminal, con seis meses, frente a un máximo de cuatro años, y el delito contra la salud pública ha pasado de ocho a tres años y medio.
Tras escuchar la confesión de los ocho sospechosos, el presidente del tribunal les ha adelantado sus condenas y ha declarado el juicio visto para sentencia.
