La Policía Nacional ha detenido a once personas e investigado a seis más en una operación contra la tenencia de pornografía infantil desarrollada en catorce provincias, entre ellas la de Alicante, con un total de dieciocho registros gracias a una investigación iniciada en la localidad gaditana de Algeciras. El arrestado en la provincia es un vecino de Elche y la operación ha permitido bloquear 6.000 cuentas de usuarios que accedieron por todo el mundo al material pedófilo.

Los registros domiciliarios simultáneos han tenido lugar en las provincias de A Coruña, Álava, Alicante, Barcelona, Castellón, Cuenca, Girona, León, Madrid, Santander, San Sebastián, Sevilla, Tenerife y Valencia, según informó ayer la Policía Nacional en un comunicado.

Denuncia en Algeciras

La investigación comenzó en Algeciras a raíz de una denuncia interpuesta por un ciudadano donde comunicaba que se estaba publicitando pornografía infantil en un grupo de una plataforma de mensajería instantánea.

Los integrantes de este grupo habían recibido imágenes anunciando que en una fecha concreta se daría acceso a un enlace que redirigía a una carpeta, alojada en una plataforma de almacenamiento virtual, desde donde podrían obtener y compartir imágenes de contenido pedófilo.

A raíz de esta información los investigadores contactaron con la plataforma de almacenamiento virtual en la que se habrían publicado esas imágenes, y lograron bloquear un total de 6.000 cuentas de usuarios a nivel internacional que habrían accedido y copiado la información de esa carpeta virtual.

Según los datos facilitados ayer por la Policía, en España lograron identificar a los usuarios de una serie de cuentas que en algún momento habrían accedido al contenido de esa «nube» y copiado el mismo.

Por ello se practicaron dieciocho registros domiciliarios y se detuvo a once personas, mientras otras seis quedaron como investigadas no detenidas.

Uno de los arrestados en la operación contra la tenencia de porno infantil poseía imágenes de la hija menor de su pareja captadas sin su consentimiento.

Asimismo, en los registros domiciliarios se han localizado una gran cantidad de archivos con contenido pedófilo y se ha intervenido multitud de dispositivos electrónicos, que están pendientes de análisis.