Un expediente de expulsión de un ciudadano colombiano de 58 años que estaba encarcelado en la prisión de Picassent ha permitido a la Policía Nacional descubrir un presunto matrimonio ilegal al comprobar que su esposa estaba aún casada legalmente con su primer marido, por lo que su mujer ha sido detenida en su domicilio de La Vila Joiosa acusada de bigamia.

El arresto de la mujer, de 40 años, fue llevado a cabo el pasado mes de octubre por agentes de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras y la detenida alegó que pensaba que estaba separada legalmente, aunque los investigadores dudaron de su versión. Una vez prestó declaración en la Comisaría Provincial de Alicante quedó en libertad provisional.

La investigación se puso en marcha a raíz de la apertura de un expediente de expulsión de un ciudadano colombiano de 58 años que se encontraba en situación irregular en España y estaba recluido en la prisión de Picassent. El abogado defensor solicitó la nulidad del expediente al alegar que estaba casado con una ciudadana española residente en La Vila Joiosa y por tanto el trámite de expulsión debería llevarse a cabo por el régimen comunitario y no por el régimen general de extranjería.

Dos inscripciones

Una vez recibidas las alegaciones la Policía Nacional comprobó que la esposa del ciudadano que se iba a expulsar figura aún inscrita en el Registro Civil de Sant Feliu de Llobregat (Barcelona) como casada con un ciudadano marroquí. Dicha boda civil se celebró en julio de 1998 y en el Registro Civil no consta ninguna anotación sobre la separación legal de la pareja.

Al mismo tiempo, los agentes verificaron que en el Registro Civil de Hospitalet de Llobregat figura la inscripción de un matrimonio religioso contraído el 28 de abril de 2012 por la misma mujer y el súbdito colombiano encarcelado en Picassent. En dicha inscripción la acusada de bigamia aparecía como soltera y no figuraba ninguna referencia a su separación legal, nulidad o divorcio.

Una vez comprobó la Policía que la mujer no estaba separada cuando se casó por segunda vez procedió a su detención al considerar que se trata de un matrimonio ilegal su segundo enlace.

Tras su arresto la mujer admitió que se casó en 1998 con un ciudadano árabe a cambio de 3.000 euros con el objetivo de que pudiera obtener el permiso de residencia. La detenida no recordaba ni su nombre y explicó que no llegó a convivir con él y que pensaba que ya estaba separada. En este sentido, indicó que ese mismo año de la boda su marido le pidió una copia de su DNI y que firmara un papel para poder separarse.

Desde entonces, según su versión, no supo nada de su primer marido hasta que este año le llamó la abogada de él para comunicarle que había que arreglar unos documentos para legalizar la separación.

Sin embargo, la Policía cree que se casó por segunda vez sabiendo que aún era legal su primer matrimonio.