La falta de un solo acusado obligó ayer a suspender en la Audiencia de Alicante el juicio a una red de 20 narcos. La suspensión se produjo cuando las defensas y la Fiscalía habían alcanzado un acuerdo para rebajar las penas a cambio de la confesión de los acusados. Al no celebrarse, algunas defensas anunciaron que ya no daban por válido el acuerdo y que defenderían la inocencia de sus representados. El juicio no podrá celebrarse hasta septiembre de 2019.

El fiscal explica en su escrito que uno de los acusados, a partir del cual comenzó la investigación, era el encargado de vender la droga, para lo que se servía de los otros acusados, que se encargaban o bien de dar salida a las sustancias, sobre todo hachís, o bien de cobrar las deudas por las ventas. Durante las detenciones, uno de los acusados arrolló con su coche a un policía que participaba en el dispositivo y otro de los acusados forcejeó con un agente, que resultó contusionado.