n Un joven británico de 20 años fue detenido el pasado fin de semana por la Policía Local de Benidorm tras ser reducido gracias al uso de una pistola eléctrica por parte de uno de los agentes que le disparó cuando forcejeaba con el portero de un pub y esgrimía el cuello de una botella de cristal. Pese a ser inmovilizado momentáneamente, el detenido aún ofreció una gran resistencia durante el traslado al coche patrulla y trató de darse a la fuga.

El incidente se produjo cerca de las seis de la madrugada del pasado sábado en la calle Gerona de Benidorm. La Policía Local tenía montado un control de alcoholemia en dicha calle y los agentes escucharon un altercado en el que incluso parecía que habían roto botellas.

Los policías vieron que había un joven que portaba una botella rota de cristal y estaba amenazando al portero de un pub. Al darse cuenta de la presencia policial el joven salió corriendo hacia otro pub y aunque la Policía Local se identificó y le dio el alto hizo caso omiso a las advertencias. El sospechoso se dirigió hacia otro pub y los empleados de seguridad de este establecimiento intentaron pararle, pero también fueron amenazados con la botella rota y no pudieron hacer nada. Sin embargo, el primer portero amenazado logró tirarle al suelo y comenzaron a forcejear. El británico intentaba zafarse del portero con la botella rota y al ver que peligraba la vida del empleado del pub uno de los policías locales usó su pistola táser. Así pudo inmovilizar al agresor, que soltó de inmediato el cuello de botella y fue detenido. No obstante, aún pudo recuperarse mientras era trasladado al coche policial y ofreció una fuerte resistencia al tiempo que trataba de darse a la fuga.

El portero sufrió lesiones durante el forcejeo y el detenido fue entregado en la Comisaría, donde la Policía Nacional instruyó las diligencias sobre el suceso.