El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Guadix mantiene abiertas diligencias contra el vecino de Marchal (Granada) al que la Junta ha quitado esta semana la tutela de trece de sus más de treinta hijos como presunto autor de un delito de abusos sexuales contra tres de sus hijas menores.

Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han explicado que el juzgado instructor de Guadix mantiene abiertas diligencias previas contra Juan Manuel H.H., un vecino de Marchal conocido como El Canuto al que la Junta ha retirado esta semana la tutela de trece de sus hijos.

Las mismas fuentes han precisado que dichas diligencias se abrieron el año pasado cuando una de las hijas explicó en su centro escolar los posibles abusos sexuales.

La menor fue sometida a un informe de credibilidad, ejecutado por la Fundación Márgenes y Vínculos, tras el que el Juzgado y la Fiscalía decidieron realizarle una exploración para que prestara declaración.

En su relato explicó los presuntos abusos sufridos así como otras situaciones de maltrato y mencionó el caso de otras dos hermanas menores que estarían también siendo objeto de un comportamiento similar por parte de su padre, según han explicado las mismas fuentes.

Las otras dos hermanas de la denunciante están pendientes de que la citada Fundación les realice el informe de credibilidad y, de cumplir con los requisitos exigidos, se les tomará declaración.

Mientras tanto, los Servicios Sociales de la Junta de Andalucía se han hecho cargo de las tres hermanas y el Juzgado ha decretado una orden de protección respecto del padre que está actualmente en vigor.

El padre permanece en libertad provisional investigado por un posible delito de abusos sexuales que negó durante su declaración judicial.

La Junta custodia desde el pasado martes en diferentes centros de menores y casas de acogida a trece de los hijos menores de edad de "El canuto".

Este vecino de Marchal tiene una treintena de vástagos de distintas edades y madres y la Junta mantiene ahora la tutela de parte de su descendencia porque supuestamente no estaban atendidos correctamente.

Tras la retirada de la tutela de los menores, que se realizó el martes pasado con un amplio despliegue de agentes de la Guardia Civil, este pueblo situado a poco más de 50 kilómetros de la capital granadina y con cerca de 400 vecinos mantiene una tensa calma.

En declaraciones a Efe, Juan Manuel H.H., de unos 60 años, negó esta semana que los menores vivieran en situación de "desamparo", aseguró que se gana la vida "honradamente" y calificó la retirada de los niños de "secuestro".