La Guardia Civil ha desarticulado en las provincias de Alicante y Valencia una red dedicada a la venta en España a través de internet de coches que habían sido robados en Italia, según informó ayer la Comandancia. Un total de siete personas de entre 28 y 56 años y de nacionalidades española, rumana y moldava han sido implicadas en los hechos. En Alicante han sido arrestadas tres personas y otras cuatro han sido citado en la provincia de Valencia en calidad de investigados. Se les imputan delitos de robo de vehículos a motor, falsedad documental y estafa.

La operación se ha desarrollado en varias provincias españolas tras la pista de una banda organizada que presuntamente se dedicaba a la venta de coches en España que habían sido robados en Italia. La investigación contaba con la dificultad de llegar al origen de la trama, pues los implicados habían dado con un método para robar sus huellas.

Según indicaron las mismas fuentes, el modo de actuar de la banda consistía en el robo en Italia de coches estacionados en la vía pública. Una vez sustraído, le borraban el número de bastidor original, le troquelaban encima el número de otro automóvil italiano de la misma marca y modelo pero que no tenía nada que ver con los hechos. También eran falsificadas la Carta de Circulación (equivalente al Permiso de Circulación español), el título de la propiedad y la factura de venta.

El destino final de los coches era su venta en España, donde se perdería cualquier rastro del vehículo original, al realizarse el cambio de la documentación falsificada por otra totalmente legal, tras su paso por las jefaturas de Tráfico de Alicante, Albacete y Madrid.

El perjuicio causado a los compradores asciende a unos 190.000 euros por haber comprado coches robados, a lo que se une los inconvenientes a los titulares de los vehículos de donde se habían obtenido los números de bastidor para duplicarlos. Los Agentes del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT) de Alicante se han apoyado por sus homólogos de las unidades de tráfico de Valencia, Albacete, Asturias y Madrid dada la complejidad de la investigación y la variedad de las provincias en las que se habrían cometido los hechos.