?Para no dejar rastro, el ahora detenido usó el TRAM para desplazarse entre Alicante y El Campello, para después desaparecer en Benidorm. Tras su precipitada salida del banco de la avenida de la Estación de Alicante, se metió en el parking subterráneo de este vial nervioso tras su asalto frustrado, y de ahí fue directamente a subirse al TRAM en la misma estación de Luceros, contigua al aparcamiento. Desde ahí fue hasta El Campello, donde se bajó en la playa del Carrerlamar y cometió el asalto de una entidad cercana a la parada. Se volvió a subir y fue a Benidorm, donde se bajó y los investigadores le perdieron ya la pista.