La Guardia Civil ha detenido en seis municipios de las comarcas de la Marina Baixa y Alta a 10 personas como presuntas autoras de una trama dedicada al delito de tráfico de drogas y de asociación ilícita e investiga a otras tres más por los mismos delitos. Los detenidos, ocho hombres y dos mujeres, fueron arrestados en Dénia, Benidorm, Altea, l'Alfàs, La Nucia y la Vila Joiosa y han quedado en libertad con vargos.

Los detenidos e investigados, nacionales de España, Rusia, Bélgica, Holanda, Italia, Noruega, Serbia y Marruecos, de edades entre los 22 y los 56 años, se conocían por residir en poblaciones cercanas, y se organizaron para distribuir la droga entre los contactos que cada uno tenía, según ha informado la Comandancia de Alicante.

La operación se inició a raíz de un registro que la Guardia Civil de Altea realizó en un camión de transporte internacional con itinerario l'Alfàs del Pi-Noruega en el que se halló una maleta con 2,5 kilos de hachís.

La Guardia Civil comenzó por investigar al remitente, un joven español de 28 años y de madre holandesa, residente en La Nucía, que hablaba varios idiomas y con un círculo de amistades bastante amplio. El chico presuntamente aprovechaba esos contactos y sus idiomas para vender droga al menudeo entre los extranjeros de su zona. Incluso algunos de esos contactos eran proporcionados por la madre, quien no dudaba en pedirle dosis para sus amigos.

El negocio se expandió al igual que un negocio piramidal, en el que los clientes se convirtieron a su vez en vendedores, formando nuevos clientes y creando nuevos puntos de venta. Así, hasta implicar a 13 personas en la venta de droga al menudeo por seis localidades.

En un principio, para conseguir grandes cantidades, contaba con unos suministradores ajenos: un holandés de 47 años residente en Dénia, y un belga de 26 años de la Vila Joiosa, que camuflaba sus macetas de marihuana entre el resto de plantas de un vivero. Pero al crecer el negocio, este joven quiso subir de nivel, autoabastecerse, y ser él mismo un distribuidor a gran escala.

A partir de entonces, decidió viajar a Marruecos junto a un amigo marroquí de 22 años para conseguir hachís, transportarlo, posiblemente, en el interior de su cuerpo, e internacionalizar el tráfico de drogas haciendo envíos de para el resto de Europa. Pero la Guardia Civil interceptó uno de estos envíos, y después de varios meses de investigación, desarticuló toda la trama.

Registros simultáneos

Cuando la Guardia Civil realizó la entrada y registro en las viviendas, lo tuvo que hacer de manera simultánea en las cuatro viviendas de los miembros más activos: 2 viviendas en Benidorm, 1 en Dénia y otra en La Nucia. De haberlo hecho de otra forma, se podrían haber puesto en contacto entre ellos para destruir la droga antes de la llegada de los agentes. Los otros cuatro domicilios registrados: dos en l'Alfàs, uno en Altea, uno en la Vila Joiosa y otro en La Nucia, se realizaron inmediatamente después.

En los registros se ha incautado de dos vehículos, una motocicleta, varios teléfonos, tabletas electrónicas, una pistola de aire comprimido, cinco gramos de cocaína, tres kilos de hachís (en su mayoría bellotas de las que se insertan en el cuerpo para su transporte), 1,5 kilos de marihuana lista para su venta, 38 plantas de marihuana, y multitud de efectos para el cultivo indoor.