Vicente Soler Romaguera fue detenido en 1995 en una operación contra una de las mayores redes de producción y distribución de pornografía infantil. Grabaron a centenares de niños de 7 a 16 años en la década de los 80 y 90. El ahora asesinado fue absuelto porque las grabaciones en las que aparecía eran de 1983 y el delito ya había prescrito.