El litoral de la provincia de Alicante registró el pasado año, como otras zonas de la península, una avalancha sin precedentes de pateras, hasta el punto de que se cuadruplicaron el número de embarcaciones interceptadas en aguas alicantinas o en tierra. Según el balance que maneja la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana, durante el pasado año llegaron 54 pateras a la costa alicantina, mientras que en 2016 fueron 14 embarcaciones, lo que supone un aumento del 285,7% respecto al año anterior. La cifra es elevada si se tiene en cuenta que fueron interceptadas en 2017 más pateras que en los tres últimos años.

La evolución del número de inmigrantes rescatados y detenidos por las Fuerzas de Seguridad también se ha disparado y el pasado año se triplicaron al pasar de 120 personas interceptadas en 2016 a 386 en 2017, según la Delegación del Gobierno. Estos datos suponen un incremento del 221,7% respecto a 2016.

Esta avalancha de inmigrantes provocó que varias decenas de ellos tuvieran que ser puestos en libertad por la falta de plazas en los centros de internamiento.

El delegado de Gobierno en la Comunidad, Juan Carlos Moragues, ha subrayado sobre la llegada de casi 400 inmigrantes a las costas de Alicante el importante papel de Salvamento Marítimo, de la Guardia Civil y de la Cruz Roja, quienes son en primera instancia los que auxilian a las personas que llegan en estas embarcaciones. «Su trabajo es crucial ya que gracias a su pronta detección pueden acudir a su rescate y evitar males mayores, porque muchas veces estas personas no saben nadar y las embarcaciones que usan no reúnen las condiciones mínimas de seguridad», precisa Moragues.

Según el delegado del Gobierno, Salvamento Marítimo tiene en la Comunidad un helicóptero y una aeronave y un equipo de integrado por 82 profesionales para atender cualquier emergencia en el mar. Además, la Guardia Civil tiene el Centro regional de Vigilancia Marítima del Mediterráneo, cuyas funciones, a traves de los radares del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE), son detectar, identificar y coordinar el seguimiento de los medios áereos, marítimos y terrestres que tiene el cuerpo. Además cuenta con las patrulleras del Servicio Marítimo de la Guardia Civil. Moragues destacó asimismo la excelente labor de los voluntarios de la Cruz Roja, «que prestan una primera asistencia a todas las personas que llegan a nuestras costas a través del convenio que tienen con el Gobierno».