Una macrooperación antidroga de la Guardia Civil dirigida por el magistrado titular del juzgado de Instrucción número 3 de Dénia ha concluido con la incautación de casi cuatro toneladas de droga en varias intervenciones realizadas en España y Marruecos y con la detención de 40 personas de sendos grupos de narcotraficantes en Girona, Pontevedra, Madrid, Melilla y Marruecos. La Guardia Civil ha intervenido además más de 13 millones de euros en efectivo, 105 kilos de hachís, 18 vehículos de alta gama y tres embarcaciones.

La operación dirigida por el juez de Dénia ha sido coordinada por Europol y Eurojust y ha contado con la colaboración de la DEA estadounidense, la Oficina Alemana de Investigación Aduanera (ZKA), la Policía Alemana, los Carabinieri italianos y la DGST Marroquí, ha procedido a la detención de 40 personas, de las que 16 están en prisión. El operativo ha sido llevado a cabo por agentes del Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de Alicante y de las Comandancias de Madrid y Melilla.

La organización criminal desmantelada estaba afincada en España y Marruecos y la dirigía desde Venezuela un ciudadano español que se encuentra en busca y captura. La Guardia Civil estima que la cocaína incautada podría haber alcanzado en el mercado español un valor superior a los 103 millones de euros.

En veleros desde la Marina Alta

La operación se inició en 2016 cuando se tuvo conocimiento de la existencia de un grupo de personas que se estaría dedicando al tráfico de drogas a través de veleros desde Dénia. Gracias a estas pesquisas los agentes interceptaron una de estas embarcaciones procedente de Venezuela y que tenía como destino el puerto de Cádiz. En su interior decomisaron unos 400 kilogramos de cocaína.

Según la Guardia Civil, a partir de esta intervención y del estudio de la documentación intervenida, se puso al descubierto la existencia de una organización internacional de narcotráfico que estaba introduciendo de forma periódica cocaína utilizando para ello novedosos procedimientos. Posteriormente, se pudo constatar que la red contaba con varios colaboradores en el País Vasco, y que los cabecillas de la organización se desplazaban desde Sudamérica hasta España para realizar funciones concretas, entre las que se encontraba la recogida de los beneficios de la venta de la droga para su traslado físico a Venezuela.

Igualmente, se pudo determinar que la organización había creado en España dos estructuras criminales independientes, la primera afincada en el País Vasco (encargada de introducir y distribuir las partidas de cocaína), y la segunda, afincada en Melilla (encargada de blanquear el dinero).

Un implicado había creado un entramado empresarial dedicado a la compra venta de muebles de madera en España, enviando la mercancía a Venezuela vía marítima en contenedores. Este sistema le permitía ocultar el dinero en dobles fondos de los mismos. En una intervención se logró interceptar más de ocho millones de euros en efectivo en el puerto de Valencia. Además se han logrado interceptar más de cuatro millones de euros en vuelos que salían desde Málaga o Melilla con destino a Venezuela.

Durante la operación, los agentes intervinieron también en Pontevedra 870 kilogramos de cocaína que se pretendían distribuir al Reino Unido a través de las provincias de Alicante y Girona. Por otro lado, en Lloret de Mar (Girona) se localizó un habitáculo oculto bajo tierra, donde habían escondido 120 kilogramos de cocaína que iban a llevar a Alicante para ser enviados ocultos en camiones a Reino Unido.