El estado del mar durante el día de ayer no le vino igual de bien a todos. Las mismas tímidas olas que hicieron disfrutar a los surfistas en la Playa de San Juan y El Campello, a otros les complicaron el día de sol, toalla y playa.

En torno a las 12.30 horas de la mañana de ayer, un hombre que disfrutaba de un baño en una zona de costa sin vigilancia en Cala Palmera, en el Cabo de las Huertas, se dio cuenta de pronto de que el mar se lo estaba llevando hacia adentro. Luchando por salir, llegó al agotamiento hasta el punto de no sentir las piernas, según explicó momentos después. Dos bañistas se percataron desde las rocas de la situación y acudieron de inmediato a su rescate.

Una vez en el agua, ambos, un uruguayo y otro argentino, se percataron de que tampoco podían salir del agua. Fue una embarcación de la Policía Local quien logró realizar finalmente el rescate de los tres bañistas momentos después, que no precisaron asistencia médica.

En la zona de costa de El Palmeral, a la altura de Aludium, y en un lugar en el que tampoco hay servicio de vigilancia, una mujer acompañada de su hijo y otro menor, con edades comprendidas entre siete y diez años, se vieron sorprendidos por el mar en un área rocosa. El marido de ella fue a rescatarles pero al ver que las condiciones no le permitían llegar a ellos, optó por salir y buscar ayuda. Entre bañistas y familiares lograron sacarles finalmente.

Hasta el lugar se trasladaron los Bomberos, la Policía Local y tres ambulancias de Soporte Vital Básico. La mujer resultó herida por rasguños en el cuerpo, pero no precisó ser trasladada al hospital.

En la playa de Guardamar,donde la bandera roja ondeaba en señal de prohibido el baño, el despiste de unos padres hizo que los socorristas de Cruz Roja tuvieran que actuar para ayudar a salir del agua a una niña francesa de doce años que se encontraba dentro de un canal de corriente.