Un hombre ha sido detenido en El Campello tras agredir a dos policías locales al negarse a salir del mar cuando ondeaba la bandera roja, pese a las indicaciones de los socorristas, según confirmaron ayer a este diario fuentes cercanas al caso. El bañista comenzó a burlarse desde el agua del personal de los servicios de socorrismo y, cuando se personaron los agentes municipales, empezó a insultarlos y a amenazarlos al intentar identificarle. El arresto se produjo tras un forcejeo en el que el presunto agresor trató de dar patadas, cabezazos y mordiscos a los agentes ante una multitud de cincuenta personas que se encontraban en ese momento en la playa y que recriminaron la actitud del implicado. El presunto agresor, un vecino de El Campello de 53 años de edad, ha sido detenido por delitos de atentado, resistencia, amenazas de muerte, lesiones y desobediencia grave.

Los hechos ocurrieron sobre las 18.30 horas del miércoles en la playa del Carrer la Mar de El Campello donde ondeaba la bandera roja y se prohibía el baño por las condiciones del mar. Los socorristas de la playa habían llamado a la Policía Local, impotentes ante la actitud de un bañista que se negaba a salir del agua pese a sus indicaciones. Desde el mar, el hombre les insultaba y se burlaba de ellos con expresiones soeces y diciéndoles que ellos a él no le mandaban. En un momento dado, llegó a ponerse el bañador en la cabeza y a continuar desafiando al personal de salvamento cogido de una boya. En la orilla, le esperaban los agentes de la Policía Local.

Los funcionarios aprovecharon para tratar de identificarle cuando intentaba marcharse a toda prisa de la playa. El hombre llegó a empujar a uno de los socorristas cuando trataba de cerrarle el paso. Al llegar la pareja de agentes municipales, éste también les empujó, arrojando al suelo de un manotazo las gafas de uno de ellos y el transmisor. Los funcionarios le recordaban que estaba ante dos agentes de la autoridad y que debía cumplir con lo que le dijeran. Los policías le emplazaban a que les diera el DNI a fin de identificarle para tramitar la sanción administrativa por incumplimiento de la Ordenanza de Playas, al tiempo que trataban de calmarlo.

Pero la situación, lejos de calmarse se fue crispando mucho más aún. El hombre se mostró desafiante ante los agentes, insultándoles y haciéndoles comentarios soeces, negándose a darles sus datos y llegar a decir que vivía en Tabarca, que estaba «casado con Dios» y que se iba a su casa. En un momento dado, se acercó al oído de uno de los agente y le dijo que le tenía que matar. El policía trató de apartarlo de nuevo, iniciándose un forcejeo que terminó con los agentes reduciendo al detenido en el suelo. Mientras era esposado, éste reaccionó tratando de morder a los agentes, mientras también lanzaba gritos, patadas, cabezazos y hasta escupitajos. El hombre siguió con sus insultos y amenazas mientras era trasladado en un coche policial al Centro de Salud para ser reconocido. Posteriormente, fue conducido a los calabozos de la Guardia Civil donde pasó la noche detenido y ayer pasó a disposición del juzgado de guardia de Alicante.

Familiares del detenido explicaron a los agentes que se trata de una persona con problemas con el alcohol y que cuando bebe se le va la cabeza. Durante el altercado, había un tío del detenido tratando de ayudar a los agentes y pidiendo a su sobrino que colaborara con ellos y les hiciera caso.