? El marroquí Jamal Zougam también estuvo confinado ocho años en el módulo de aislamiento de la cárcel de Villena. Pero en marzo de 2013 fue trasladado a la prisión salmantina de Topas para seguir cumpliendo la pena de 42.922 años de prisión que le impuso la Audiencia Nacional al considerarlo uno de los autores materiales de los atentados en los trenes de Atocha. Zougam llegó al centro penitenciario Alicante II de Villena el 1 de noviembre de 2004 procedente de Soto del Real. Fue arrestado en su locutorio del barrio de Lavapiés dos días después de perpetrarse el atroz ataque. A los pocos días de ingresar en la cárcel de Villena envío un escrito de queja al director porque consideraba que sus condiciones de vida eran «muy duras». Pero la queja no le sirvió de nada ya que siguió sometido al mismo régimen. Meses después fue trasladado a Madrid para comparecer como acusado en el juicio del 11-M y, en una de sus intervenciones ante el juez Bermúdez, expresó su malestar por el trato que recibía en la prisión alicantina. Un alegato que el magistrado cortó de forma expeditiva y tajante.