La Policía Nacional lanzó ayer una operación en coordinación con las autoridades chinas en la que se desarticuló una red compuesta por centenares de ciudadanos de este país acusados de estafar masivamente desde España a otros cientos de compatriotas, informaron fuentes conocedoras de la investigación.

La operación, que continúa abierta, ha incluido registros en una veintena de domicilios en las provincias de Madrid, Barcelona y Alicante. Las citadas fuentes precisaron que, hasta primera hora de la tarde, se había detenido a al menos un centenar de personas por estafar a nacionales que residían en China.

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, resaltó la «magnífica» colaboración con el país asiático «para perseguir el delito y al delincuente» durante su discurso en el acto de presentación del nuevo director de la Policía, Germán López Iglesias. A la ceremonia, llevada a cabo en el Complejo Policial de Canillas en Madrid, asistió el embajador de China en España y diferentes representantes de la Policía de este país.

La red utilizaba «call center» (centros de llamada) para contactar y luego extorsionar a ciudadanos chinos que residían en su país. Para ello, se hacían pasar incluso por policías y alertaban a sus compatriotas de riesgos relacionados con la delincuencia económica, convenciéndoles de que, por su seguridad, debían transferir una cantidad de dinero a una cuenta bancaria gestionada por el entramado delictivo.Inmuebles ficticios

La Policía acredita que a veces utilizaban inmuebles ficticios y conseguían que las víctimas pagaran importantes cantidades de dinero. La red utilizaba viviendas en zonas lujosas de Madrid, Barcelona y Alicante. Sólo en uno de los chalés registrados en Madrid se detuvo a una treintena de «trabajadores» de esta red.

En la macrooperación participaron cerca de quinientos agentes de la Policía Nacional, además de policías chinos que se trasladaron a España para colaborar. De hecho, fueron las autoridades chinas las que reclamaron a España, vía comisión rogatoria desde Beijing, actuar contra estos estafadores que habrían conseguido timar a cientos de ciudadanos chinos en los últimos meses.