La carrera oficial hacia la presidencia de la Audiencia de Alicante comenzó ayer en Madrid con la exposición de los cinco aspirantes ante la comisión permanente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) de sus méritos y el programa con que se presentan.

Los veinte minutos de media que cada uno de los candidatos empleó en este trámite fueron, en realidad, el punto de partida de una competición que al final acabará ganando quien haya logrado concitar más apoyos entre los 21 miembros del órgano de gobierno de los jueces. Más que lo dicho ayer, lo que realmente pesa es la capacidad de cada uno en conseguir los avales necesarios. Ganará aquel que sume más votos sin necesidad de que sea la mayoría del consejo. De no descartarse ninguno de los aspirantes tras las intervenciones de ayer, el pleno del CGPJ del próximo 20 decidirá quién va a presidir la Audiencia los próximo cinco años tras la marcha de Vicente Magro después de tres mandatos.

Citados por orden alfabético fue la magistrada Pilar Alhambra, la única mujer y única aspirante también de fuera de Alicante la que inició la ronda destacando su actividad en Madrid, donde trabaja y reside, en asuntos relacionados con la Violencia de Género.

A esta juez, que aseguró sentirse como si fuera de Alicante, le siguió Juan Carlos Cerón, quien se presentó con sus siete años como decano y sus dos en la Comisión Permanente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad, habló de crear tres grupos de servicios comunes potentes en Alicante, Elche y Benidorm, del Estatuto de la Víctima para evitar una segunda victimización y de la Oficina de recuperación de activos como proyectos a desarrollar.

Recién llegado de París, donde se encuentra por motivos profesionales, el presidente del Tribunal de Marcas desde su creación, Enrique García-Chamón, destacó sus 19 años en la Audiencia, su conocimiento de las sentencias de los tribunales europeos y una de sus resoluciones en contra de la discriminación de la mujer en las fiestas, en concreto en las de Alcoy. Entre sus proyectos, hacer las sentencias más compresibles, accesibles y previsibles.

El presidente de la sección Séptima desplazada en Elche, José de Madaria, llegó con la bandera de sus diez años en Alicante y sus quince en la ciudad ilicitana, son conocimiento profundo de la realidad judicial de la provincia y un currículum solvente.

Francisco Soriano, miembro del Tribunal de Marcas, cerró las comparecencias a las que se presentó como el único magistrado de la carrera judicial con especialización en Civil y Mercantil, además de en Menores, y donde abogó por una Justicia moderna y preparada para las nuevas demandas sociales.