Un hombre de 54 años y nacionalidad rumana falleció el pasado lunes en la Unidad de Quemados del Hospital General de Alicante a causa de las graves heridas sufridas en el incendio provocado en un edificio de Benidorm presuntamente por dos compatriotas de 39 y 48 años detenidos por la Policía Nacional y puestos en libertad tras pasar a disposición judicial. En el incendio también resultó herida otra persona pero con quemaduras menos graves. El fuego fue presuntamente provocado porque las víctimas no quisieron prestarles dinero a los detenidos.

El incendio se produjo la madrugada del pasado 6 de noviembre en un edificio de apartamentos abandonado en Benidorm que es frecuentado por personas sin recursos económicos que duermen allí. La sala del 091 fue alertada del incendio y los agentes procedieron a desalojar a las personas.

Durante la inspección del inmueble fueron localizadas dos personas encerradas en una habitación que intentaron esconderse del fuego y resultaron heridas, una de ellas con quemaduras en el 90 por ciento de su cuerpo.

El fuego fue provocado en la cuarta planta, una zona donde se acumulaba una gran cantidad de muebles y basura, con el consabido riesgo de que se propagara con más rapidez al resto del edifico.

Los agentes averiguaron que las dos víctimas habían sido amenazadas por los autores con prender fuego al edificio si no accedían a prestarles dinero.

Agentes de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Benidorm realizaron diversas indagaciones y detuvieron primero al presunto autor del fuego acusado inicialmente de un delito de tentativa de homicidio -consumado tras fallecer la víctima una semana más tarde- y otro de incendio con riesgo para las personas.

Posteriormente detuvieron a otro ciudadano rumano acusado de amenazas al amedrantar a las víctimas con «finalizar lo que el principal implicado había comenzado», según informó ayer la Policía Nacional. Los dos declararon en dependencias policiales y tras comparecer en el juzgado de guardia quedaron en libertad provisional.