Vicente Magro no estará solo en la carrera a la presidencia de la Audiencia de Alicante. Sus colegas Juan Carlos Cerón, ex juez decano de Alicante, y José de Madaria, presidente de este órgano judicial en Elche, quienes ya se perfilaban como candidatos antes de que Magro anunciara su intención de presentarse a la reelección del que sería su cuarto mandato, mantienen la intención de optar a este cargo que tiene que renovarse el próximo mes.
La pretensión de Magro de continuar al frente de la Audiencia desvelada ayer por este diario no ha modificado un ápice la idea de Cerón y de Madaria de intentar también conseguir el puesto.
De hecho, en el traslado desde el Palacio de Justicia de Benalúa a la Audiencia hace algo más de año del ex juez decano (lo consiguió en 2008 y en 2015, ambas en la primera vuelta) tuvo su peso específico el deseo de presidir la Audiencia, una pretensión que oficialmente aún no ha confirmando pero que tampoco se ha molestado en ocultar.
Madaria, por su parte, quien en el 2011 optó a la presidencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), confirmó ayer a preguntas de este diario su intención disputarse la presidencia de la Audiencia con quien se presente, aunque quiso dejar claro las buenas relaciones que mantiene con Magro, cuyo reelección no vería con malos ojos.
La decisión del actual presidente de presentarse a la reelección ha pillado por sorpresa después de que el pasado julio aceptara ser candidato a una de las vocalías del Consell Jurídic Consultiu, una propuesta abanderada por Ciudadanos pero que tenía que consensuarse con todas las fueras con representación en el Parlamento autonómico.
El retraso en cerrar estos nombramientos, cuyo debate es complicado que se aborde antes de la conclusión del actual mandato de Magro al frente la Audiencia, ha llevado al magistrado a replantearse también los inconvenientes de abandonar la carrera judicial (a lo que le hubiera obligado su puesto en Consell) de cara a su futuro profesional.
Los tres aspirantes hasta el momento a la presidencia de la Audiencia tienen el reto de conseguir el apoyo de 11 de los 21 miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). En su carrera frustrada al TSJ, Magro obtuvo 9 votos frente a los 12 que auparon a Pilar de la Oliva.
