La Policía Nacional busca a un atracador bizco que en la madrugada de ayer no sólo asaltó una clínica veterinaria del distrito del Trànsits, de donde sustrajo cerca de 450 euros, sino que además obligó a la empleada que hacía el turno de noche a contemplar cómo se masturbaba y eyaculaba ante ella, en una de las consultas. Al parecer, el ladrón, español y de unos 30 años de edad, es sospechoso de haber cometido otros atracos con anterioridad.
Los hechos ocurrieron en torno a la una de la madrugada de ayer, cuando la veterinaria estaba sola en la clínica. Un desconocido que se hizo pasar por cliente le pidió el precio de una incineración. Un tiempo más tarde regresó con un bulto envuelto en una sábana, simulando que llevaba el cadáver de su perro. Pero, una vez dentro, amenazó a la trabajadora y la obligó a abrir la caja fuerte, de donde cogió unos 450 euros. A continuación, en vez de irse, volvió a la estancia donde estaba la chica y la obligó a ver cómo se masturbaba, al tiempo que le espetaba frases obscenas. Tras concluir, se fue, momento en que la chica pidió ayuda la 112.
