Un hombre ha sido detenido por arrojar un líquido abrasivo a una camada de gatos recién nacidos en el Puerto de Alicante, según confirmaron ayer fuentes policiales. La Asociación Felinos Lo Morant se ha hecho cargo de las crías que los ha puesto en manos de una veterinaria para curarles las quemaduras sufridas, aunque uno de ellos se encuentra en estado grave.

Los hechos ocurrieron el domingo por la tarde tras la llamada a la Policía de varios ciudadanos indignados por lo ocurrido, algunos testigos presenciales de la agresión. Las redes sociales bullían ayer al conocerse los detalles de la agresión a las crías. Al detenido, que es el dueño de un restaurante de la zona, se le imputa un delito de maltrato animal y ha reconocido que les arrojó un cubo a los animales pero que pensaba que contenía agua. El presunto agresor pasó la noche del domingo en los calabozos de la Comisaría y ayer quedó en libertad tras prestar declaración, aunque el atestado se remitirá al juzgado donde se le tendrá que citar para determinar si se le lleva al banquillo acusado de este delito.

Según confirmaron a este periódico fuentes policiales, la alerta se produjo sobre las 20.30 horas de la tarde del domingo en el Muelle de Levante del Puerto después de que una mujer llamara a la Policía tras encontrarse una caja con los gatos dentro maullando y gritando de dolor y con evidentes signos de quemaduras. Las cuatro crías apenas contaban con seis semanas y eran gatos callejeros que solían dormir bajo unas escaleras de la zona comercial, indicaron algunos de los testigos. Personal de los locales vecinos habrían manifestado que al arrestado le molestaba la presencia de los gatos en las proximidades de su negocio.

La mujer avisó en un primer lugar a los agentes de la Policía Portuaria que, tras las primeras gestiones, dio traslado de los hechos a los agentes municipales y finalmente se hizo cargo la Policía Nacional que, a través de funcionarios de la Brigada de Seguridad Ciudadana procedieron a la detención del presunto agresor. Las gestiones de los agentes determinaron que se localizara a una persona que pudo ser un testigo presencial del momento en que se arrojó el cubo sobre la camada de gatitos.

A través de su página en Facebook, la asociación Felinos Lo Morant informó ayer que el examen veterinario señala que las crías presentan graves lesiones traumáticas en la piel y en el sistema digestivo. En la clínica se les ha retirado el líquido que causó las graves quemaduras que encuentran en la boca, cabeza, cuello, abdomen y extremidades. Uno de ellos, el más afectado, presenta dificultades respiratorias y lesiones en los ojos y el sistema digestivo, según el informe médico. Las crías estaban en estado grave, hospitalizadas y con tratamiento. El pronóstico era reservado dada la gravedad y extensión de las quemaduras. En la asociación estaban a la espera del informe del veterinario para ir a presentar denuncia y personarse en la causa.

Otra voluntaria de la asociación se encargó ayer de ir a buscar a la madre de la camada, que también quedó ingresada en otra clínica ya que al parecer también había resultado afectada por el producto corrosivo.