Ha pasado ya casi un año y medio del asalto a un camión con tabaco en la A-7 pero la Policía nunca olvida los casos pendientes y acaba detener en Orihuela al segundo implicado en el violento robo cometido tras hacerse pasar por guardias civiles. Las pesquisas siguen abiertas para apresar al tercer implicado.

El nuevo arrestado estaba identificado por pruebas de ADN y una de las víctimas le había reconocido en fotografías, pero ayer negó la acusación y quedó en libertad provisional tras declarar en un juzgado de Orihuela asistido por el abogado Roberto Sánchez Martínez.

El suceso ocurrió en diciembre de 2014 cuando un camión que transportaba tabaco valorado en 200.000 euros tuvo que parar en la A-7 a la altura de Cox después de que un coche con luminosos similares a los de la Policía le obligara a aminorar la marcha hasta detenerse en el arcén. Tras detenerse tres hombres con pasamontañas y chalecos de guardias civiles se acercaron a la cabina del camión e hicieron bajar a la fuerza a los dos ocupantes.

Les cachearon y luego les ataron las manos a la espalda y los pusieron unas gafas de protección opacas. Los dos camioneros fueron trasladados en coche por dos asaltantes a la urbanización Montepinar de Orihuela, donde les abandonaron tras ser encañonado con una pistola uno que pudo soltarse la brida. Mientras tanto, el tercer atracador se quedó en el camión para llevárselo, pero desistió al no poder arrancarlo.

En un camino de la carretera Orihuela-Benferri tenían preparado un segundo camión similar para cargar el tabaco robado.

Este camión fue alquilado por otro implicado que ya fue detenido a principios de año. El día del asalto al camión en la A-7 denunció el robo del vehículo pesado para tratar de evitar que no sospecharan de él.