Un tribunal ha condenado a una pena de 10 meses de prisión por un delito de apropiación indebida a un agente de aduanas de Alicante que se quedó con 75.848 euros que un cliente le había dado para pagar el IVA y unos aranceles.

La sentencia, dictada por la sección segunda de la Audiencia de Alicante y hecha pública hoy, recoge que el acusado, representante legal de la firma Amartrans SL, no abonó a la Agencia Estatal Tributaria (AET) el dinero y lo destinó "a un fin distinto" al previsto.

El procesado confesó durante el juicio sobre esta causa, celebrado el pasado 3 de marzo, que dejó de ingresar a Hacienda la cantidad por tasas e impuestos que le había entregado su cliente, la empresa Universal Global Logistics SA.

Explicó, según se recoge en el fallo, que pasaba por un "periodo de iliquidez transitoria", si bien alegó que el denunciante podría haber ejecutado unos avales que él tiene firmados para este tipo de situaciones.

"No es excusa", señalan los magistrados, aunque le aplican la atenuante de reparación del daño y le condenan solo a 10 meses de cárcel, tal y como quería la fiscalía, porque reconoció a su cliente lo ocurrido "en un intervalo breve de tiempo" y le devolvió el dinero mediante un plan de pagos.