La Audiencia Provincial sentó ayer en el banquillo a dos acusados de robar dos cajas registradores en un supermercado de Alicante el pasado mes de septiembre. La Fiscalía reclama para cada uno la pena de cuatro años de prisión por un delito de robo con fuerza al contar con numerosos antecedentes por hechos similares. La petición de condena fue inferior a los seis años que se reclamaban inicialmente, pero el fiscal consideró que existía una atenuante para ambos por su adicción a las drogas.

Los hechos se produjeron a las siete de la madrugada del pasado 29 de septiembre después de que la puerta metálica de un supermercado sito en la calle Pintor Gisbert de Alicante fuera violentada con una palanca, de donde los ladrones se llevaron una caja registradora y el contenido de otra y se dieron a la fuga. La Policía detuvo a los dos acusados tras realizar varias batidas por la zona. Uno de ellos llevaba encima la caja registradora que contenía un importe total de 253,84 euros; mientras que el segundo fue localizado con 83 euros encima, presumiblemente procedentes del robo de la segunda caja. Los daños causados en el local fueron valorados en 617 euros. Los dos acusados admitieron ayer su participación en el robo y adujeron su dependencia a las drogas para cometerlo, motivo por el que sus defensas aportaron los justificantes médicos correspondientes.

Las fuentes consultadas por este diario señalaron que las penas solicitadas por la acusación se dispararon en virtud de la aplicación del nuevo Código Penal que agrava las condenas para los reincidentes en robos.