Los agentes de la Guardia Civil que arrestaron al presunto descuartizador de La Torre de les Maçanes han asegurado en el juicio que éste se encontraba lúcido y les explicó parte de lo que había ocurrido. Los agentes se personaron en el Hospital de La Vila después de que el presunto asesino de presentara en Urgencias diciendo que había matado a su novia. Los funcionarios han testificado en el juicio que el acusado les dijo que había golpeado a su víctima con un hacha en la cabeza y le había cortado un pie. "Nos dijo que lo que había hecho no lo podía contar y que ya lo veríamos cuando fuéramos a la casa", dijo uno de los agentes. Esta versión contradice lo explicado por el acusado que dijo que sufrió un delirio por las drogas que tomó ese día y que se le fue la cabeza.

Los familiares del acusado, su padre y su tío, aseguraron que les llamó por teléfono para que fueran a recogerle porque se encontraba mal y se lo encontraron desnudo y lleno de arañazos. Ambos declararon que estaba como ido y decía incoherencias, aunque tras las preguntas de las acusaciones admitieron que les reconoció de camino al hospital que había matado a su novia.