Un empresario y un empleado del constructor Enrique Ortiz han negado esta mañana haber sacado altas sumas de dinero o conocer que se iban a realizar éstas con el fin de hacérselas llegar al exalcalde Luis Díaz Alperi para compensar los gastos de los pisos de sus hijas, quienes residirían en viviendas de una urbanización construida por el promotor, según la Policía.

Pablo Rico y Santiago Bernáldez han acudido como imputados ante el juez que investiga el Plan General de Ordenación Urbana de Alicante (PGOU), donde han negado que una extracción de 174.000 euros tuviera otros fines que no fueran para pagar servicios prestados para construir el hospital de Elche. El hermano del promotor, Virgilio Ortiz, también citado, se ha acogido a su derecho de no declarar. Según la Policía dos extracciones de 174.000 euros y 150.000 fueron destinadas al exalcalde a través de la esposa de Ortiz para hacer frente a los gastos que previamente habían hecho las hijas del exregidor para adquirir las viviendas donde residirían.

El primero de los interrogados, Pablo Rico, ha admitido las extracciones de dinero investigadas, pero ha incidido en que se sacó en relación a la prestación de servicios para la construcción del Hospital del Vinalopó de Elche, donde Ortiz participaba en una unión temporal de empresas (UTE). Por su parte, el empleado de Ortiz Santiago Bernáldez explicó que no tiene nada que ver con las extracciones monetarias y que no quedó con nadie en la puerta de ningún banco como dice la Policía.