Francisco Javier O., un policía nacional de 28 años, falleció ayer en Madrid arrollado por un tren de Cercanías tras un forcejeo con un inmigrante al que intentaba identificar, que arrastró al agente y ambos cayeron a la vía. El agresor ingresó en estado muy grave.

Apenas dos horas después de que un hombre provocara una gran alarma en la cercana Atocha al amenazar con inmolarse con los explosivos que, según él, portaba, en la estación de Embajadores un hombre nacido en Costa de Marfil y con nueve antecedentes gritó e insultó a dos agentes de la Brigada Móvil.

Fuentes policiales indicaron a Efe que los agentes intentaron identificar al hombre, que se negó a ello, y se inició un forcejeo que acabó con la caída a las vías del tren de uno de los policías y del inmigrante.

Según una grabación, el inmigrante tiró del agente y lo arrastró hasta el límite del andén para precipitarse juntos sobre las vías. La Policía analiza ahora el vídeo, que pudo haber grabado un pasajero, para comprobar si las imágenes corresponden al suceso, aunque todo apunta a que así es.

El vídeo confirma la versión ofrecida por el agente compañero del fallecido de que el individuo que era identificado agarró al agente y lo lanzó a la vía del tren al paso del convoy del ferrocarril.

Como consecuencia de la caída y posterior atropello, el agente falleció en el acto, mientras que el otro hombre, identificado como Ali Raba Yode, de 27 años, sufrió un traumatismo craneoencefálico severo y otros politraumatismos por el impacto y permanece ingresado en el hospital 12 de Octubre, al que fue trasladado en estado "muy grave" por sanitarios del Samur-Protección Civil.

Francisco Javier O., nacido en la provincia de Ávila, llevaba seis años en el cuerpo y estaba destinado en la Brigada Móvil-Policía en el Transporte de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana.

Su cometido era garantizar la seguridad en medios de transporte públicos, como trenes de media y larga distancia, prevenir y perseguir los delitos, como el tráfico de drogas o la trata de seres humanos, y atender a los viajeros.

Mientras, el hombre que forcejeó con el agente, nació en Costa de Marfil el 1 de enero de 1987 y llegó a Almería en 2011 en patera. Desde entonces, cuenta en España con nueve antecedentes policiales, entre ellos por amenazas, robo con violencia y resistencia y desobediencia. También por infringir en dos ocasiones la Ley de Extranjería y por entrar ilegalmente en España.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, acudió al lugar de los hechos para conocer de primera mano todo lo sucedido y expresar sus condolencias a los compañeros del agente fallecido. Antes, en una rueda de prensa para presentar el balance de la siniestralidad en las carreteras, Fernández Díaz explicó que «al ir a identificar a una persona con la que habían tenido un pequeño incidente, en el forcejeo con esa persona que se negaba a la identificación y que, según me han dicho se dirigió a ellos en tono no pacífico, cayeron al andén».

Anoche se instaló en el complejo policial de Canillas, donde están ubicadas varias comisarías generales del cuerpo, la capilla ardiente de Francisco Javier.