Un nuevo caso de violencia de género dejó ayer con heridas leves a una mujer de 37 años en la pedanía ilicitana de Torrellano, al ser agredida por su expareja, que presuntamente la roció con un líquido abrasivo en plena calle, en la plaza de San Crispín. El suceso tuvo lugar sobre las 7.45 horas, y según afirmaron varios testigos, el agresor estaba esperando a la víctima en las inmediaciones de su domicilio, ataviado con un casco de moto para que no evitar ser reconocido. Al ver a su expareja, el hombre se dirigió hacia ella con una botella en la mano, y tras una breve discusión, le arrojó el líquido corrosivo sobre la cabeza y la espalda.

La casualidad quiso que una patrulla de la Policía Local se encontrase a escasos metros del lugar de la agresión, por lo que rápidamente pudieron atender a la víctima con la ayuda del gerente de una cafetería cercana y algunos clientes, que lavaron las heridas con abundante agua para eliminar la sustancia abrasiva y le proporcionaron ropa limpia antes de que llegara una ambulancia de DYA y un SAMU que trasladó a la víctima al Hospital General de Elche.

El hombre, que tenía orden de alejamiento, se dio a la fuga en el acto y la Policía Nacional localizó poco después la botella que utilizó para el ataque y el casco que usó para proteger su identidad en un contenedor de una calle paralela a la plaza (la calle clavel). Finalmente, el supuesto agresor fue detenido horas más tarde en el Hospital General de Alicante, al que acudió quejándose de molestias en un ojo, a raíz de que le salpicara parte del líquido.