«Se ha oído perfectamente el tiroteo y me da miedo pasar por ahí. Siempre hay bulla en la zona pero no hay manera de que hagan algo», manifestó ayer una vecina de la zona a la que tres disparos despertaron ayer con el susto en el cuerpo.

Los residentes reconocían ayer haber escuchado los disparos y mostraron su preocupación por los altercados que genera esta discoteca. A pesar de sus denuncias, el local sigue funcionando y muchas veces aseguran que cierra ya por la mañana sin dejar dormir al vecindario.

Por otra parte la clausura de la zona por la investigación policial también obligó ayer a retrasar la apertura de varios comercios. M.V. / j.a.r.