Ocho hombres, entre ellas dos menores de 16 y 17 años, fueron asesinados por sicarios debido a un presunto ajuste de cuentas en la madrugada del pasado sábado cuando celebraban una fiesta en Caicara del Orinoco, en el estado venezolano de Bolívar. Las víctimas celebraban la graduación de la educación secundaria de los dos menores asesinados.
Los jóvenes celebraban una fiesta de graduación de bachillerato cuando por sorpresa aparecieron varios pistoleros en vehículos y motos que obligaron a los presentes a arrodillarse para luego dispararles con armas automáticas a la altura de la cabeza, según informa el periódico venezolano «Correo de Caroní».
Este mismo diario informaba ayer tarde en su edición digital de que habían sido detenidas ya dos personas por la Policía y que en el crimen participaron seis hombres.
«Dentro de la vivienda los golpearon y luego los ajusticiaron sin piedad», expresó un representante del Consejo Comunal de la ciudad. «Es la peor masacre que se ha podido vivir en Caicara, queremos justicia, nuestras calles están de duelo, no dejaron a nadie vivo», exigió.
Por el momento, no hay detenidos y la Policía no maneja ninguna información clara ya que las hipótesis para establecer una causa del crimen son múltiples, aunque todo apunta a un ajuste de cuentas con algunos de los fallecidos. «No todos los que mataron eran (de) mala conducta, pero por uno pagan todos», afirmó un vecino.
Problema sindical
Algunas fuentes señalan que se trata de un problema sindical, mientras que otros creen que se trata de un enfrentamiento entre bandas que se disputan el control del lugar como pudieran ser los conocidos Caraqueños o el Erick.
La Fiscalía ha designado a los fiscales que, conjuntamente con la Policía, buscarán establecer las causas del ataque que costó la vida, además de a los dos adolescentes, a otros dos jóvenes de 18 años, dos de 19, uno de 28 y otro de 35.
